Combatir un mal crónico
EDUCACIÓN Y APOYO AL PACIENTE Y SU FAMILIA, CLAVES EN DIABETES.
● Reconocer los síntomas, el diagnóstico temprano y un tratamiento adecuado son vitales para evitar que la diabetes aumente las tasas de mortalidad o el deterioro de la calidad de vida de quienes la padecen.
A esta enfermedad crónica no transmisible se le considera una pandemia y se le atribuyó a ella o a condiciones relacionadas con ella, la muerte de 4 millones de personas el año pasado en el mundo, según la Federación Internacional de Diabetes (IDF).
Hoy, en el planeta se estima que hay 425 millones de personas con la enfermedad. Para el caso de Colombia, se habla de 3,6 millones de diabéticos, aunque algunas estadísticas hablan de subregistro, debido a que 40 % de personas tienen esa condición de salud no diagnosticada.
Las estadísticas son aún más aterradoras. Según la IDF y la Organización Mundial de la Salud ( OMS), de aquí al año 2045 en el mundo podría haber 629 millones de personas con la enfermedad.
Sobrepeso, obesidad, herencia, sedentarismo, hipertensión y tener más de 45 años son algunos de los riesgos de padecer diabetes, apuntan la Asociación Colombiana de Endocrinología, Diabetes y Metabolismo y la OMS.
La enfermedad se genera cuando hay ausencia, deficiencia o mal funcionamiento de la hormona insulina, que produce el páncreas y que se encarga de transformar la glucosa proveniente de alimentos y de otras fuentes en energía para el cuerpo. Cuando la insulina no procesa de manera adecuada la glucosa se eleva el nivel de azúcar en la sangre.
La diabetes trae complicaciones como daño cardiaco, amputaciones, falla renal crónica o riesgos de accidentes cerebrovasculares pues afecta órganos vitales. De hecho a esas complicaciones se les atribuyen numerosa muertes de personas con diabetes.