Vivir la moda
Visité Colombiatex y me encantó lo que viví: una feria vibrante, de pasillos llenos, caras sonrientes y a la expectativa por conocer novedades y entender las nuevas dinámicas del mercado.
El espacio dedicado a los insumos se antojaba apetitoso. El brillo, por ejemplo, seguirá reinando otras temporadas, en efectos tornasolados y un sinnúmero de ideas que irán sobre las prendas como cadenas, lentejuelas y tonos iridiscentes como una manera cotidiana de presumir lujo, de estar cercanos a esa suerte de exceso que sugieren los artistas con sus numerosas joyas en tamaños XL.
Me atrajo, y de manera especial, el sentido sostenible de esta edición. Como bien lo presentaron con la Ruta de la Sostenibilidad la gestora social Diana Osorio y Lorenzo Velásquez, de
Inexmoda: un propósito que ofrece réditos al Planeta y a las mismas empresas, que se conectan con las necesidades ambientales de nuestros tiempos, con prácticas cotidianas como un mejor manejo del agua, el consumo de electricidad y la producción de prendas con materiales reciclados, ya sean textiles o el plástico de las botellas PET.
Y con María Luisa Ortiz conocí la iniciativa Todos Ponen, que recoge uniformes descartados de la Policía, que serían incinerados, y los transformó en morrales, carteras y cartucheras, que fueron elaboradas por gente sin oportunidades laborales y comprometida con la paz del país.
Moda circular. Moda que va y viene. Moda que respeta. Moda que compromete.
¡Qué buena edición Colombiatex!