Restitución de tierras a comunidades étnicas
El dominio que por años han tenido grupos armados en el país de territorios que usan para el narcotráfico y otros delitos hizo que por mucho tiempo comunidades como el pueblo indígena nasa del Cabildo Central Kwe’sx Yu Kiwe, ubicado en zona rural de Florida, Valle del Cauca, estuvieran en medio del conflicto, desplazadas forzosamente, víctimas de desapariciones forzadas y asesinatos selectivos, reclutamiento y de que su territorio fuera minado.
Ese cabildo tuvo que esperar décadas para que en septiembre del año pasado, un juez, gracias a una demanda étnica que presentaron con apoyo de la Unidad de Restitución de Tierras (URT), los reconociera como víctimas del conflicto y les entregara derechos territoriales sobre 5.015 hectáreas en el Valle.
Como el caso del pueblo nasa, con el apoyo de la URT, comunidades indígenas y afros del país han recuperado –desde 2011 hasta la fecha– 225.172 hectáreas de territorio, repartidas en 9 departamentos, una extensión total superior al departamento de Quindío (184.500 hectáreas).
Esas hectáreas restituidas se han ordenado en 18 sentencias judiciales y han beneficiado a 10.175 familias.
Sally Mahecha, directora de Asuntos Étnicos de la URT, explicó que se han beneficiado a diferentes pueblos indígenas, como los embera katío, embera dóbida, cuna tule, wayú,wounaan, sikuani, entre otros, y a las comunidades afro Consejo Comunitario de la cuenca del río Yurumanguí y Consejo Comunitario Renacer Negro de Timbiquí.
Además de los 18 casos en los que ya hay una sentencia, en la actualidad hay otras 67 demandas en curso en despachos judiciales.