Cali recibe ahora a los viajeros de Haiti
A TERMINAL LLEGAN VIAJEROS EN RUTA A PANAMÁ.
Vienen entre negativas y altos costos para llegar hasta la frontera con Panamá.
El gremio de taxistas abogaba ayer por un colega que fue detenido cuando transportaba a unos haitianos desde Pasto y cruzaba por el Valle del Cauca, en la ruta a la frontera con Panamá.
A la misma hora numerosos ciudadanos de ese país estaban alegando con migrantes de Brasil y Venezuela por sillas en un bus que les llevaría a Necoclí (Antioquia), donde se estima que hay unos 15.000 haitianos sin poder seguir al incierto Tapón del Darién para llegar a México, Estados Unidos o Canadá.
El secretario de Seguridad y Justicia de Cali, Carlos Soler, señaló que ante el incidente del domingo se hizo presente la Policía. Era más de un centenar de haitianos. Otros 250 viajeros estaban en tránsito.
Al sitio llegaron funcionarios de Migración Colombia. Soler dijo que los haitianos no tienen en sus planes quedarse en la ciudad, que es la receptora de la mayoría.
El gerente de la Terminal de Transporte, Ivanov Russi, dijo que se incrementó el flujo de migrantes. Llegan entre 1.000 y 1.500 personas al día en su viaje.
Pero anotó que debido a directrices de Migración Colombia, no se les puede brindar el servicio del transporte intermunicipal. Russi planteó la posibilidad de un ‘puente humanitario' para que no se genere una crisis social grave.
Los haitianos recurren así al transporte ilegal para continuar su recorrido. Eso los pone en riesgos de redes que quieren conseguir dinero a su costa. En las afueras de La Terminal algunos haitianos se quejaban porque desde Ipiales les ha tocado afrontar que les cobren altas sumas en dólares, por cualquier producto.
La Personería atendía la situación. La llegada de haitianos se incrementó desde el asesinato del presidente de ese país, Jovenel Moïse, el 7 de julio pasado.
Crisis en Nariño
Los haitianos llegan por la frontera con Ecuador, a través de los 48 pasos irregulares solo en el municipio fronterizo de Ipiales.
En podría temen estar a las puertas de otra crisis migratoria similar a la que viene enfrentando Necoclí, en Antioquia.
“Ayer se reunieron más de 600 personas y nos advirtieron que en las próximas horas estarían llegando aquí unas 4.000 personas más”, dijo el subsecretario de Paz y Derechos Humanos de la Gobernación de Nariño, Amilcar Pantoja.
El panorama se torna aún más crítico porque según el funcionario “no hay control en la frontera”, recalcó.
De acuerdo con los migrantes, pagan una especie de ‘peaje' a personas que se encuentran a su paso por dichos caminos ilegales y que de no hacerlo no les permiten continuar su recorrido.
A su arribo a Ipiales tomaron buses de servicio público y vehículos particulares que los trasladaron hasta la ciudad de Pasto.
“Incluso a ellos les venden unos tours por 300 dólares hasta Medellín”, dice un funcionario, pero su objetivo es continuar hasta Panamá.
La atención a los haitianos se torna ahora muy difícil “porque aquí ya estamos llenos con los migrantes venezolanos”.