James, en cumbre mundial del fútbol
El volante colombiano ha consolidado una carrera cargada de éxitos.
● Es una de las grandes figuras que ha dado el fútbol colombiano en los últimos años, lidera una nueva generación de jugadores que le ha devuelto el reconocimiento mundial a nuestro balompié. James David Rodríguez Rubio, el hombre del talento en la Selección Colombia y un volante que cuenta con una calidad que ha sido codiciada por los grandes clubes del mundo.
Pero para llegar a la élite del fútbol mundial, así como lo han hecho muchos, tuvo que afrontar un camino lleno de adversidades y dificultades. Nació en la ciudad de Cúcuta el 13 de julio de 1991, época en la que su padre, Wilson Rodríguez, jugaba con el club ‘motilón’. Pero un par de años después, el pequeño James y su madre, María del Pilar Rubio, se trasladarían a Ibagué tras un difícil proceso de separación con el progenitor.
En la capital tolimense, Rodríguez Rubio empezaría el camino en el fútbol. A su vida llegó Juan Carlos Restrepo, quien compartió vida con María del Pilar y se encargó de la crianza del joven jugador. La afición de los padres por el deporte, invitaron a James a incursionar en campeonatos infantiles y juveniles que fueron testi- gos de su naciente talento. Las selecciones Tolima ganaron varios torneos de la categoría con el apoyo un jugador que ya empezaba a llamar la atención.
Uno de esos clubes que robó su atención tras el exitoso paso en un Torneo de Pony Fútbol, en Medellín, fue el Envigado Fútbol Club, institución deportiva que creyó en sus capacidades y lo incorporó a su plantel a la edad de los 14 años. Su llegada al profesionalismo sucedió a temprana edad, su capacidad con el conjunto ‘naranja’ rápidamente le permitió vestir la camiseta de la selección nacional en la categoría sub 17.
Sin disputar muchas temporadas en el fútbol colombiano, James Rodríguez fue contratado por el Club Atlético Banfield en 2008, conjunto que le apostó a una joven figura que ya había dado campanadas de su calidad en el Mundial Pre juvenil en Corea 2007. Y el ‘taladro’ no se equivocó; el cucuteño se convirtió en el extranjero más joven en anotar un gol en Argentina y creció en las canchas que lo hizo uno de los referentes del equipo del sur del Gran Buenos Aires.