EPM cumplió 66 años en medio de retos
LA EMPRESA AFRONTA GRANDES RETOS ECONÓMICOS.
Sobrecostos en Hidroituango, el covid y el posible embargo a sus cuentas, los líos.
Este 6 de agosto EPM, quizá la entidad pública más importante de Medellín, cumplió 66 años de existencia. Sin embargo, su aniversario no llega en la mejor de las realidades de la denominada ‘joya de la corona' de la capital antioqueña.
Incertidumbre y sobrecostos en Hidroituango, afectaciones por el covid, amenaza de embargos a sus cuentas, diferencias con la Gobernación y oposición a la enajenación de sus activos hacen parte de su presente.
En la más reciente sesión del Concejo de Medellín dedicada a las finanzas de la empresa, se conoció la realidad de la empresa en materia financiera, las metas al corto y mediano plazo y las estrategias para cumplir con dichas metas.
Según informó EPM, la situación financiera de la empresa depende de tres factores: la evolución de la contingencia en Hidroituango, el cobro de las indemnizaciones de las pólizas de seguros y los efectos de la emergencia del covid-19.
Tres cosas que son una absoluta incertidumbre.
Jorge Andrés Carrillo Cardoso, gerente general de EPM, explicó que para el Plan de Inversiones al 2023 se requieren 11,2 billones de pesos.
El directivo aclaró que estas son “inversiones irrenunciables”, ya que en su mayoría son para la terminación de Hidroituango, y el resto corresponden a compromisos regulatorios, por lo que EPM no está en capacidad de reformular dicho plan. De ese total, el megaproyecto se llevará $4,22 billones en esos años. “Estamos en el plan de fondeo de EPM, no queremos tener un exceso de endeudamientos, sabemos que las calificadoras nos están monitoreando y hemos sido transparentes”, dijo Carrillo.
Al respecto, la concejala María Paulina Aguinaga expresó su preocupación por las billonarias pérdidas que está generado Hidroituango. Cifras mostradas por la cabildante indican que EPM perdería más de $4 billones si no entra en operación y que ya ha dejado de percibir $6,46 billones por no entrar en operación en 2018 debido a la contingencia.
Esto, sin sumar los $7,1 billones de sobrecosto en su valor inicial, pasando de 11,2 a 18,3 billones de pesos.
“En Hidroituango han ejecutado, a mayo, $12,9 billones, faltando 5,4 billones por ejecutar. Además, una cosa es que se empiece a generar esa energía y otra que se comience a comercializar esa energía. Entonces ¿cuándo comienza a generar de manera comercial Hidroituango? preocupa que año tras año estas fechas de entrada en operación se han ido cambiando”, expresó Aguinaga.
Acciones en UNE
Carrillo le explicó al Concejo que para garantizar los recursos para el Plan de Inversión 2021-2023, la compañía necesita recursos por $6,5 billones. De ese total, $1,9 billones ya tienen crédito contratado o llevan muy avanzadas las negociaciones.
“Para los $4,6 billones restantes se requiere buscar alternativas de financiación, por lo que se vuelven relevantes las discusiones sobre desinversiones y otras estrategias”, expresó Carrillo.
La venta de la participación accionaria –no controlante- de EPM en UNE e Invertelco, es vital para lograr esta meta. Sin embargo, requiere la aprobación del Concejo.
Precisamente, durante este mes se estará discutiendo este proyecto de Acuerdo en la corporación.
Al respecto, el gerente de EPM contó que los dividendos pagados a EPM por esta participación es de $314.000 millones entre 2015 y 2021, sin embargo, la gran mayoría fue en los primeros años.
“Desde el 2017 los dividendos han sido prácticamente inexistentes, es una tendencia que no tiende a cambiar, e incluso las necesidades de capital en este negocio tienden a aumentar”, argumentó Carrillo.
Deuda de EPM
El gerente informó que, al 31 de marzo de 2021, esta era de $25,5 billones, de los cuáles la mayoría está en bonos de dólar (26%) y bonos globales (21%), banca internacional (17%) y banca local (11%).
Al respecto, la concejala Aguinaga dijo: “los bancos y acreedores son dueños del 50,5% de los activos de la Matriz EPM y del 57,5 % de los activos del Grupo EPM. Endeudarse per se no es malo, lo malo es hacerlo en inversiones o proyectos que ni siquiera rentan el costo del capital”.