MUJER ALÓ
La creadora de la marca Santalupana quiere llevar a Dios directo al corazón de sus clientas
Natasha Micolta y sus joyas espirituales
Santalupana es una marca 100 por ciento espiritual, con piezas hechas a mano, que lleva a otro nivel el porte de los accesorios religiosos. Segúnsu creadora, Natasha Micolta (36), sus diseños tienen un diferencial muy claro y es llegar a lo profundo del corazón de cada persona en cualquier momento de la vida.
“Mi amor por diseñar nació desde muy pequeña y fue evolucionando hasta tomar forma hace 8 años. Impulsada por el gran milagro de mi vida, el nacimiento de mi hija Guadalupe, e inspirada por el profundo amor que siento por Dios y la devoción a la Virgen María. Entonces, mis diseños y accesorios tomaron un nuevo rumbo: crear accesorios católicos con un estilo moderno que llevan a otro nivel el porte de bisutería religiosa”, comenta Natasha.
Administradora de Negocios Internacionales y mamá apasionada, la bogotana ha logrado que estos accesorios dejen de ser algo para guardar en el bolso o en la billetera y sean elementos útiles y fashionistas. "Cuando se tiene un producto de Santalupana se comparten emociones, sentimientos y momentos y mis clientes encuentran un diseño elaborado con toda la inspiración. También reciben un sentimiento: amor, gratitud, apoyo, celebración, felicidad, como presente", revela.
Su marca refleja la espiritualidad, en la que cree profundamente. Han sido 8 años de inspiración divina y de constante trabajo para consolidar sus creaciones. Ya cuenta con tres líneas de accesorios: Bendiciones (hogar, nacimiento, matrimonio), Momentos (recordatorios para cualquier ocasión, primeras comuniones, bienvenida, despedida) y Accesorios (aretes, cadenas, pulseras). "la evolución es un motor en lo más profundo de mi corazón y de mi alma, que me impulsa a emprender, por Dios, por mis hijos, por mi familia y por mis clientes", asegura Natasha.
la bendición del hogar ha sido su producto estrella. Es un accesorio decorativo y que a su vez tiene un significado representativo para los católicos. Elaborado mezclando cintas y medallas, hacen que quien lo regala o lo compra, sienta esa protección de Dios en sus vidas. "Cuando una persona recibe este tipo de presente, es ideal llevarla a bendecir donde un sacerdote, para después ubicarla en la entrada de la casa. También es para darle una bienvenida amorosa a quienes llegan a nuestro hogar y sentir esa paz y tranquilidad de estar en un lugar especial", concluye.