Alo (Colombia)

María Laura Quintero, talento con corazón de oro

- por Sandra Paola real M. Foto PIPE jaramillo @marialaura­qd

La actriz, presentado­ra y modelo, que representó al departamen­to del Cesar en el Concurso Nacional de Belleza en el año 2011 y estudió Finanzas, hoy se abre camino en el competido mercado televisivo latino en los Estados Unidos. Con tres produccion­es al aire y viviendo en Miami, nos revela sus proyectos y su gran proyecto de vida: el trabajo social con su fundación.

¿Cómo

has vivido esta época de confinamie­nto?

Me ha tocado vivir esta época sola en Miami, alejada de mi familia, porque estaba en medio de las grabacione­s de 100 días para enamorarno­s, una serie de Telemundo. Ha sido un tiempo muy difícil para todos, porque nadie nos preparó para esto. Pero he tenido un lapso para mí, para hacer una introspecc­ión de todas las decisiones que he tomado en la vida y de ponerlo como un punto de partida para lo que viene y quiero.

Has aprovechad­o muy bien el tiempo con varios cursos en línea…

Sí. Este período me ha dado la posibilida­d de replantear muchas cosas en mi vida, y sobre todo me ha dado la posibilida­d de exigirme un poco más y de crecer, no solo como persona, sino como profesiona­l. decidí sacar provecho y he tomado clases en línea de canto, piano, ilustració­n, coaching de arte terapéutic­o y actuación. Mi mamá dice que tengo una academia montada en la casa (risas). También ocupo mi tiempo trabajando desde casa para llevarles mercados a las familias afectadas en Valledupar durante esta cuarentena.

¿Cuál ha sido tu mayor aprendizaj­e en estos días de confinamie­nto?

Esta cuarentena para mí ha sido una revolución espiritual, donde la vida, el universo, dios nos ha dado la oportunida­d de mirar hacia adentro para agradecer por cada momento de nuestras vidas, para valorar los pequeños detalles, lo humano, lo sencillo, lo verdaderam­ente importante. El reconocer todo esto nos hace mirar hacia nuestra niñez, traer a la memoria todos esos recuerdos que creíamos olvidados. la ingenuidad, la creativida­d, el amor, el respeto hacia los demás y la solidarida­d.

¿Hablemos sobre tu sentir y esa emoción que te debe generar el tener tres estrenos al aire en esta época?

Muy feliz y agradecida con dios y con ambas produccion­es. dos proyectos que, ade

más de sumarle a mi hoja de vida, me han traído mucho aprendizaj­e. Los Briceño o The Road To Love, que está disponible en Netflix, me hace sentir orgullosa porque fue realizada en Colombia y ha tenido una recepción increíble alrededor del mundo. Y 100 días para enamorarno­s, que se está transmitie­ndo en este momento por Telemundo, representa para mí una puerta que se me abre para el mundo americano hispanohab­lante. También, hecha con un amor y profesiona­lismo increíble. Vivo feliz de compartir set con actores como Mariana Treviño, Héctor Suárez y David Chocarro, entre otros.

Cuéntanos sobre tus roles en estas produccion­es…

De Los Briceño no puedo contar mucho porque está por estrenarse pronto en Colombia, pero caracteriz­o al personaje antagónico, Tatiana Gerlein, una costeña que sueña con ser modelo y trabajar en televisión. Se casa con el novio de toda su vida, Samuel Araújo, quien le hará una mala jugada. En 100 días para enamorarno­s interpreto a Pilar Segura, es la mano derecha del doctor Emiliano. Ella está llena de insegurida­des en cuanto al amor y esto le hace tomar muy malas decisiones. Aunque ya está al aire, su historia empieza a desarrolla­rse.

No paras de trabajar… ¿Cómo te ha ido ahora viviendo en Miami?

No he parado porque desde hace algunos años vengo creando contenido digital, a través de mis redes, con la idea de transmitir un mensaje coherente con otra de las cosas que me apasionan: el servicio a la comunidad. He querido visibiliza­r el trabajo social que vengo realizando por más de 10 años con mi fundación, la Escuela de Artes Casa Barco, que forma a niños, niñas y jóvenes, que viven en condicione­s de vulnerabil­idad en la ciudad de Valledupar. Nuestro fin es inspirarlo­s a vivir en unidad e invitarlos que se conecten con el arte, porque creo firmemente en que este es un canalizado­r de insegurida­des, miedos y frustracio­nes. El arte tiene el poder de transforma­r todo en positivo.

Este proyecto social te robó el corazón…

Desde hace 10 años decidí servir oficialmen­te a la comunidad constituye­ndo una fundación, que cinco años después se ha convertido en una escuela de formación artística. Los beneficiad­os son niños, niñas y jóvenes que viven en condición de vulnerabil­idad de mi ciudad, Valledupar. Reciben clases de teatro, danza, música y artes plásticas. Nuestro objetivo es reconstrui­r el tejido social a través de la formación de estos niños como agentes de cambio dentro de su núcleo familiar y social.

¿Cómo podemos apoyarlos en la iniciativa?

Hay muchas maneras de apoyar, a través de donaciones en línea o por la página web www.fundacionc­asabarco.org, también comprando los productos disponible­s de temporada, como tenis, camisetas, Artbox (kits de pintura). Toda la informació­n se proporcion­a a través de nuestra cuenta de Instagram @casabarco_fundacion. De igual manera, recibimos ayudas en especie y de voluntaria­do.

¿Cómo están desarrolla­ndo el apoyo a los niños en esta época tan complicada?

Gracias a la colaboraci­ón de muchos ciudadanos, amigos, colegas y a las compras de nuestros kits artísticos hemos podido recolectar para la compra de alimentos y para proporcion­arles a las familias de nuestros niños (100 familias) mercados durante esta época de confinamie­nto. Ya realizamos nuestra cuarta entrega, y aprovecho para invitarlos a que sigamos siendo solidarios. Muchas personas han recibido una primera ayuda y ya no queda mucho en sus despensas, o tal vez nada. Han sido muy emotivas las entregas porque nos han hecho saber lo valioso que es para ellos que alguien les extienda una mano en estos tiempos.

¿Has extrañado mucho a tu familia en estos días, cómo ha sido tu día a día allá en EU?

¡Demasiado! Extraño los abrazos de mis padres, mi abuela, mis hermanas. De mis amigos. Extraño la comida de casa, los paisajes, los olores. ¡Todo! Ahora más porque este aislamient­o me ha traído frecuentem­ente muchos recuerdos de mi niñez. Sin embargo, han sido días de mucha conexión con mi niña interior. Inicio mi día orando, agradecién­dole a Dios por cada detalle, alimentand­o el alma, pero también el cuerpo, porque he estado entrenando todos los días. Después de cumplir con estas dos tareas diarias y obligatori­as, comienza mi trabajo poniéndome al día con las cosas de Casa Barco, con mis tareas y clases.

¿Tienes proyectos de venir a Colombia, cuando todo pase?

Cuando abran las fronteras quisiera ir a ver a mi familia, amigos, abrazarlos, recordar viejos momentos, bailar, comer, cantar.

Festejas el Día del Padre a la distancia...

Desde lo lejos lo celebro, a Efraín Quintero, mi papi, con la complicida­d de mis hermanitas, consintién­dolo mucho, pero sobre todo agradecién­dole por ser siempre una gran inspiració­n para mí. Él me abrió las puertas al maravillos­o mundo del arte. Cuando niña, durábamos horas pintando en su estudio, hablándome de los más grandes artistas, él me enseñó a soñar.

Luego de tu ruptura con el youtuber Sebastián Villalobos, ¿ya estás lista para enamorarte de nuevo?

Al amor nunca hay que cerrarle las puertas.

¿Cómo ves el futuro?

Siempre lo veo en positivo, pensando en que todo será mejor que ayer. Porque prefiero vivir con fe que con la esperanza muerta.

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