papá jaime
Muchas personas basan sus vidas en cómo se ven y se la pasan mirando cómo impresionar y ser aprobadas por los demás, y es precisamente este punto uno de los más debatidos durante este tiempo de cuarentena, donde al tener que permanecer en casa la mayor parte del tiempo, por primera vez esto dejó de ser importante y pasó a un segundo plano. Esto que ha sucedido es un llamado para que retornemos a lo que es realmente importante, a lo básico, a lo que nos puede llenar realmente de paz y alegría, y eso no tiene nada que ver con cómo seamos físicamente, con lo que hagamos o con lo que poseamos. Eso tiene que ver con cómo nos sintamos interiormente, con que vibremos amorosamente, con la manera como ayudemos a los demás y con la huella que dejemos en el mundo a través de nuestras acciones.
En esta cuarentena, por primera vez, para muchísimas personas, la belleza interior primó sobre la belleza exterior; por primera vez, miles de hombres y mujeres guardaron sus mejores pintas y sacaron sus ropas más cómodas y menos elegantes; por primera vez, las mujeres dejaron sus peluquerías y sus peinados de última moda y los cambiaron por sus colas de caballo y sus peinados más sencillos; por primera vez, las personas han dejado de centrar su felicidad en lo que dirán de ellas, en lo que tiene, y se concentraron en lo que se dicen a sí mismas, en el amor y en el compartir en familia. Esto ha hecho que miles de personas logren por primera vez apreciar realmente el poder infinito y maravilloso que tiene la belleza interior, ya que cuando la valoramos y apreciamos, sabemos que nada del exterior puede tocarla o destruirla, y este es el mayor poder que cualquier persona puede tener. Tú eres la única persona que tiene el poder para cultivar esa belleza interior y descubrir ese mundo espectacularmente exótico, natural y bello, donde la paz que emana de tu corazón es la fuente inagotable de amor y alegría, y será la que iluminará y resplandecerá tu mundo cuando tu juventud, lozanía y belleza exterior desaparezcan. Por eso considero que este ha sido un momento muy importante en la historia de los seres humanos, ya que muchos de ellos han entendido y recapacitado acerca de dónde deben centrar su energía y sus esfuerzos para continuar manteniendo esa belleza interior que los llevará por el verdadero camino de la felicidad. Si quieres conservar tu belleza interior y quieres que ella prime por encima del qué dirán y de las opiniones de los demás, te invito a que incorpores en tu diario vivir las siguientes rutinas y disciplinas:
Ejercicio físico diario al amanecer: Te llena de energía y te conecta con tu corazón.
Meditación, preferiblemente en la naturaleza: Te ayuda a ir hacia tu interior, manteniéndote balanceada y tranquila. Practicar la soledad: No hay mejor compañía que la de uno mismo. Debemos aprender a apreciar la soledad y el silencio; no debemos tenerle miedo. Consentirte y cuidar tu cuerpo: Esto lo mantendrá en buen estado y hará que tu energía fluya adecuadamente. Autoobservarse: Aprender a ser consciente de tu inconsciente, ya que es la única forma de moldear tu personalidad y tu carácter hacia la paz y la armonía.
Realiza la magia de hacer actos de amor por los demás, esto hará que tu espíritu se engrandezca y te traerá una gran paz interior.
Recuerda que tu cuerpo se puede arrugar, pero el problema grande es cuando tu espíritu se arruga, porque ahí es cuando aparece la tristeza, la frustración o la depresión.