¿POSPUESTO?

Según varios medios como W Radio (uno de los medios aliados), desde el principio el concierto de Paul Mccartney estuvo mal organizado: el anuncio anticipado de varios medios de un concierto sin confirmar y la firma de un multimillonario contrato que elevó de manera exagerada los precios de las boletas fueron, entre otras, las causas de la cancelación, algo que nunca había pasado en toda la carrera del ex-beatle.

Esta segunda visita del artista a nuestro país sería en el marco de la gira One On One, que ha llenado estadios en más de diez países. El concierto en Colombia sería en Medellín, una ciudad en la que Guns N’ Roses, Madonna y Beyoncé agotaron boletería.“muchos estaba dispuestos a verlo de nuevo, pero pagar el doble del concierto en Bogotá, más los costos del viaje, hizo que muchos desistieran”, dice Fernando Posada, investigador y fanático.

Según el comunicado de Tyrona Eventos, uno de los organizadores, la cancelación fue una decisión del artista, y su “equipo de gira y los promotores están estudiando la reprogramación del show como parte de una próxima [no esta] gira en América del Sur”. Sin embargo, varias fuentes aseguran que el elevado precio de la boletería (entre 700.000 y 1.500.000 pesos) y por ende las malas ventas, fueron causa directa de la cancelación. Por otro lado, quienes compraron tiquetes para viajar a Medellín no recibirán un reembolso (con suerte la coyuntura de la huelga de Avianca les ayude a algunos). Aunque los organizadores dicen que el concierto está pospuesto, “yo creo que es imposible que el cantante regrese a nuestro país”, dice Posada.

Colombia es hoy un escenario apetecido en la región. Prueba reciente de ello es el exitoso concierto de U2, al que, sin embargo, asistieron alrededor de 20.000 personas, cuando supuestamente las boletas se habían agotado mucho antes. ¿Qué pasó con las otras 25.000?

No es un secreto que los organizadores de eventos como estos en Colombia suelen aprovecharse del público vendiendo a precios exorbitantes las boletas, cancelando presentaciones o cambiándolas de lugar a última hora. Eso no solo es un irrespeto total con el público: tal vez un efecto posible sea que los artistas lo piensen dos veces antes de incluir al país en sus giras latinoamericanas.