controla tu vida
Hola a todos, ¿Cómo están?, esperamos que con sus energías arriba y realizando todos esos anhelos que tenían en mente. Por nuestra parte, felices de poder estar una vez más junto a ustedes.
El mes pasado estuvimos compartiendo sobre el rol protagónico que debemos asumir en el cuidado de nuestra mente, alma, corazón y bienestar en general.
En este nuevo espacio nos gustaría comentarles y traspasar nuestros conocimientos con el fin de entender cómo funciona nuestra mente en nuestro día a día y la importancia de controlarla para poder concretar cada uno de nuestros objetivos y metas.
Hoy en día estamos inmersos en una sociedad donde las exigencias son cada vez mayores, nos sentimos estresados y muchas veces ni siquiera tenemos claro el motivo. Tener una linda
casa (ojalá propia) y un buen auto, tener el celular de última generación, el armario con ropa de marcas importantes, o comer en los mejores restaurantes. Incluso para algunos el conseguir muchos seguidores en Instagram, son exigencias “sociales” que las hemos ido transformado en “autoexigencias” y no nos detenemos a analizar si realmente vibramos con eso que la sociedad ve como necesario y terminamos viviendo enfocados en lo material y en lo que esperan los demás, quitando espacio a lo que realmente es importante para nuestro crecimiento y evolución.
Pero esto tiene una explicación que creo necesaria compartir para entender por qué nos cuesta tanto ir a lo esencial. Todos tenemos una personalidad que está formada por las circunstancias de la vida y de nuestra relación con el entorno, y también tenemos un alma, esencia o espíritu, que es el soplo que nos da vida. Ambas, personalidad y alma, se conectan a medida que vamos haciendo un proceso de concientización o de desarrollo personal.
Sin embargo, generalmente esta conexión está interrumpida y tenemos la sensación de que estamos separados de nosotros mismos y terminamos viviendo con el piloto automático encendido, hasta que alguna enfermedad, alguna catástrofe o cualquier otro imprevisto en el camino, nos lleva a reconectar con nuestra esencia, pero no sin antes pasar por el camino del miedo.
Cuando queremos un mejor trabajo, pero nos da miedo soltar lo que ya tenemos y terminamos otro año más en el mismo; o cuando quiero viajar, pero me da miedo malgastar el dinero que he juntado; o cuando me diagnostican una enfermedad, y el miedo me impide buscar alternativas para encontrar la sanación, es cuando debemos darnos cuenta que necesitamos trabajar con urgencia en esta reconexión.
Cuando des espacio para conocer tu esencia, a tomar conciencia de tu Yo Superior, cuando te ames, cuando te aceptes, no habrá espacio para el miedo y podrás optar, decidir y vivir lo que realmente genera plenitud en ti. Este camino de autoconocimiento no es fácil, a veces es necesario transitar por los espacios oscuros de nuestra vida que nos hicieron desconectarnos, pero ten claridad de que al final de ese camino estarás tú, en tu mejor versión.
Debemos ser conscientes también de que todos los factores externos que nos rodean causan un estrés en diversos grados, nos generan ansiedad, angustia, y muchas veces un desgano que nos impide avanzar…
Ahora: ¿Qué sucedería si viéramos el estrés cómo una oportunidad y algo que nos puede ayudar a desarrollar nuestro máximo potencial?
El estrés se presenta como respuesta automática y natural de nuestro cuerpo ante cualquier situación que resulte amenazadora o desafiante, mediante la cual se prepara para enfrentarla, por lo tanto es algo que siempre te acompañará durante tu vida y día a día. Cuando una persona dice vivir sin estrés, es simplemente porque ocurre una adaptación a ese tipo de presión y se manejan las variables para que el estrés no genere dificultades en nuestro cuerpo físico o emocional. Es decir, cuando enfrentas una situación de estrés, a la vez se presenta una oportunidad para poder desarrollar tus capacidades y potencial como persona. Es una oportunidad para buscar soluciones a los diversos desafíos que debes enfrentar y salir de una posible zona de confort que siempre se encuentra a la vuelta de la esquina...entrando en la rutina de hacer día a día lo mismo...
Si quieres llegar más lejos de donde te encuentras, sentirás estrés! Si quieres desarrollar tu carrera profesional, sentirás estrés! Si quieres tomar una decisión importante en tu vida emocional, sentirás estrés! Pero hay algo muy distinto entre sentir el estrés y SUFRIR el estrés. Te dejamos un abrazo gigante y te deseamos que tengas un hermoso y provechoso mes.
Tenemos una personalidad que está formada por las circunstancias de la vida y de nuestra relación con el entorno, y también tenemos un alma, esencia o espíritu, que es el soplo que nos da vida.