RESTAURANTES
Recorrido: despierta en Cali con estos sabores Astrid & Gastón
Doña Nieves
Báscula: milhojas
CINCO LUGARES ESPECIALIZADOS EN DESAYUNOS TRADICIONALES Y NUEVAS PROPUESTAS REPRESENTAN EL MOVIMIENTO GASTRONÓMICO ACTUAL DE
LA CAPITAL DEL VALLE DEL CAUCA.
UNA MANERA DE CONOCER EN PROFUNdidad la ciudad de los siete ríos, es acercarse a sus ollas y fogones. Los mecatos y amasijos son el alma de esta ruta de desayunos, que ilustra los sabores del Valle del Cauca y nos cuentan una historia sobre el mestizaje culinario y la gastronomía caleña. Platos populares, panadería artesanal y menús experimentales, muestran entre cucharas y tenedores un gran potencial.
INSPIRACIONES LLEVADAS AL HORNO
Gali Paz Zahavi es un repostero de origen israelí que reside en Colombia, dueño desde el 2001 de una pastelería y panadería bautizada con su apellido. El propósito de este establecimiento es recordarles a los comensales el sabor de la comida preparada en casa. Aunque los savarines y el kremschnitte son una tentación, los fines de semana se convirtieron en una cita para desayunar bocados judíos como los rugelach (panes frescos de trenza) o el Croque Madame (sándwich con huevo, jamón y salsa cremosa). “Hacemos productos de calidad y con mucho amor para que nuestros clientes tengan una deliciosa experiencia”, afirma Wilber Jaramillo, administrador del lugar.
MÁS ALLÁ DE UN CAFÉ
“En Café Valparaíso fusioné mis pasiones para darle vida a un rincón lleno de poesía en Cali. Queremos que las personas se desconecten de la realidad y vuelvan a enamorarse de las cosas simples”, expresa Fernando Pardo, dueño de un lugar en donde las paredes están decoradas con retratos de sus escritores favoritos. Además, los platos de la carta tienen nombres de libros o de versos de Benedetti o Cortázar, entre otros. Se recomienda probar el desayuno Pablo Neruda, un pan artesanal con crema agria y huevos pochados, acompañados con tomates secos y parmesano. En este lugar, ubicado en el barrio La María, se pueden disfrutar platos y distintas versiones de café en medio de actividades culturales que varían de acuerdo al día.
HERENCIA EN PEQUEÑOS BOCADOS
En la Plaza de Mercado Alameda hay una galería extensa de puestos donde se degustan platos típicos del Valle del Cauca como las marranitas, mezcla de chicharrón con plátano amasado.también se venden variedad de tamales en hojas de plátano bijao, envueltos de maíz o de choclo, arroz atollado con carnes, aceite achiotado y papas coloradas. Estas preparaciones son solo una muestra de la larga lista de productos y aliños de la zona y que ofrecen una dosis de sabor arraigada en esta cocina desde 1536.
ANTOJOS QUE PROVOCAN
En la Panadería Miami siempre hay un aroma inconfundible a pandeyucas y pandebonos. Estos panecillos de maíz con almidón de yuca, queso costeño y cuajada, salen de los hornos para complementarse con tazas de chocolate, avena, luladas o champús. Este lugar busca mantener vivos varios clásicos de la panadería vallecaucana: arepas de maíz blanco o amarillo, empanadas con relleno de cerdo y res, aborrajados con carne demechada y hogao, pasteles de yuca… Un repertorio sencillo en el corazón de los caleños que hace del lugar uno de los más visitados.
DELICIAS EN VERSIÓN NATURAL
Domingo Mercado de Vereda es un lugar para comer productos locales y de temporada los domingos. “Retornamos a lo natural, a la tierra, creamos un mercado donde cada artículo tiene una historia. Hasta ahora ha sido un evento itinerante, pero a partir del 1 de agosto tendremos un punto fijo para seguir exaltando los productos de origen colombiano”, nos cuenta Catalina Vélez, chef y creadora de esta iniciativa. Junto al mercado hay una mesa larga para que los visitantes ordenen platos como: calentao a base de quinua, sofrito, cerdo crujiente, fríjoles y trocitos de maduro o migas de envuelto de maíz con queso siete cueros.