El Nobel de los maestros.
Durante el Global Education & Skills Forum, realizado en Dubai el pasado mes de marzo, se anunció el nombre del mejor profesor del año. Andria Zafirakou fue elegida entre 30.000 postulaciones y recibió un millón de dólares que quiere usar para celebrar la
Es con inmenso orgullo que digo que mis padres eran profesores”, declara Sunny Varkey, empresario e innovador indio creador de The Varkey Foundation, institución que desde 2013 otorga el premio más prestigioso para los maestros: el Global Teacher Prize.
El premio nace de los desconcertantes resultados del primer estudio sobre el estatus de los profesores en la sociedad, “Global Teacher Status Index 2013”, que reveló estadísticas abrumadoras, entre ellas una que impactó especialmente a Varkey: solo en China un 35 % de la población consideró que los profesores tenían un estatus como el de los doctores; en Turquía, España y Egipto llegó a poco más del 10 % y en el Reino Unido esta cifra apenas alcanzó el 5 %.
“Necesitamos ir más lejos si queremos encontrar verdaderas maneras de celebrar esta noble profesión”, es la conclusión de Sunny Varkey. Así nació el Nobel de los maestros.
Este año, Colombia tuvo una participación especial: tres docentes entres los 50 nominados y uno entre los diez finalistas. Luis Miguel Bermúdez, profesor del colegio Gerardo Paredes IED, alcanzó esta distinción por su impactante proyecto en el que incluía clases de educación sexual en el pénsum escolar. La escuela donde trabaja está en una zona de la localidad de Suba, rodeada de pobreza, violencia y abuso sexual. En 2014, cuando empezó el proyecto, la cifra de embarazos adolescentes ascendía a 70, para 2017, había llegado a cero. “Amo enseñar porque he aprendido que, aparte del amor, la educación es la mejor herramienta para transformar el mundo”. Este ha sido uno de sus lemas.
Los 50 nominados de diferentes países estuvieron en Dubai para la ceremonia de entrega del premio. Semana Educación habló con algunos de los finalistas.