Desafíos de básica y media.
En los últimos años, la educación básica y media ha avanzado, especialmente en cobertura. Pero la calidad y el gasto eficiente siguen siendo sus puntos débiles. Estas son las necesidades que más apremian a los colegios.
REFORMA INMEDIATA AL SGP
La base de todos los problemas de la educación es la falta de presupuesto. Gobierno tras gobierno se ha hecho evidente la necesidad de más recursos para mejorar el sistema educativo, pero cada uno ha implementado su política sin hacer mayores ajustes presupuestales. Sin embargo, este año parece que no sucederá lo mismo. Expertos advierten que la bolsa de recursos que la nación gira para la educación básica, más conocida como Sistema General de Participaciones (SGP), está desfinanciada, y es necesario plantear una reforma constitucional para que no colapse.
La razón se remonta al gobierno de Andrés Pastrana y al segundo mandato de Álvaro Uribe Vélez, quienes plantearon dos grandes reformas para recortar temporalmente –hasta 2016– el crecimiento de los recursos del SGP, con la justificación de que el país estaba en crisis fiscal. Según expertos, las participaciones pasaron de representar el 46 % de los ingresos de la nación en 2001, al 25 % en 2017. Además, el año pasado se vencieron los términos establecidos por la ley que fijaban el incremento real del SGP. Por esta razón, el sistema educativo reclama con urgencia una reforma: si la bolsa continúa sin recibir los recursos necesarios, el sistema tendrá problemas para pagar la nómina docente y los servicios públicos de las instituciones, y será más difícil garantizar la calidad y gratuidad de la educación.