La educación en la era del conocimiento
En medio de una transición en la política de gobierno en educación, Colsubsidio desea compartir el éxito de su modelo educativo, que bien es un ejemplo para el país.
Desde el próximo 7 de agosto, el carácter de la política educativa en Colombia tiene que dejar de ser solo pedagógico, para evolucionar hacia un modelo transversal que abarque el conocimiento, la lógica, el desarrollo de otras capacidades –como las artísticas y deportivas–, e integre ciencia, innovación y tecnología. Es decir, que la educación en Colombia potencie realmente las capacidades de los ciudadanos, para que puedan ser más competitivos y contribuyan a cerrar las brechas. Es así como Colsubsidio, la caja de compensación familiar que lleva más de 60 años liderando el desarrollo de proyectos educativos que buscan la transformación social, ha querido aportar haciendo referencia a su modelo educativo, internacionalmente reconocido y el cual puede ser un ejemplo para el sistema de educación del país.
El sector empresarial es una columna muy importante en la construcción de educación, no solo por medio de recursos, sino también a través del conocimiento. Entre las empresas que le han apostado a transformar la educación formal, siempre ha estado Colsubsidio. Con su programa educativo y cultural, implementado en 52 municipios de Cundinamarca y en las localidades más vulnerables de Bogotá, ha logrado cambiar el modelo pedagógico formal de sus colegios en un sistema integral que promueve las habilidades de sus estudiantes. Un esquema donde convergen aspectos multidisciplinarios que fomentan el desarrollo en el siglo XXI.
Para extender este tipo de experiencias, la gerente de Educación y Cultura de Colsubsidio, Adriana Gutiérrez, asegura que es muy importante que en esta nueva administración se entiendan tres temas claves que pueden ayudar a mejorar la educación de este país. En primer lugar, el sistema educativo debe ir más allá de la práctica pedagógica, ya que el aprendizaje debe involucrarse con otros conocimientos y saberes. “Vale la pena mencionar que la cultura, junto con el saber local de nuestros pueblos, y por supuesto la ciencia, la tecnología y la innovación son catalizadores del desarrollo humano y productivo, los cuales debemos integrar en los procesos de formación”, expresa.
Esta fusión de conocimientos permite, de acuerdo con datos de Colsubsidio, que el sentido de comunidad cobre más fuerza en un individuo, que la innovación social permee el aparato académico educativo y que exista una línea de apoyo entre diferentes áreas del conocimiento.
“Cada vez está más demostrado que el modelo pedagógico formal, de cara a un nuevo ciclo de vida de la humanidad, es obsoleto. Por eso, nosotros desarrollamos un modelo convergente, que permite fusionar conocimiento, educación, cultura, ciencia, tecnología e innovación. Eso es lo que uno encuentra en Colsubsidio”, afirma Gutiérrez.
En segundo lugar, también es importante, según ella, que el próximo dirigente comprenda que, más allá de la educación, está el conocimiento. “En Colsubsidio pensamos que en nuestro país hablamos mucho de educación, pero se nos ha olvidado hablar de gestión del conocimiento, un grave error, ya que es la que recoge los frutos de la educación”.
Y finalmente, para Gutiérrez es clave dejar de abordar la educación por partes separadas. “En Colombia, siempre hablamos por sectores, y cuando hablamos de educación y de conocimiento, no podemos dejar por fuera a ningún sector. Creo que es clave trabajar intersectorialmente para ese fin”.
Por su alcance y la innovación en su modelo pedagógico, el cual facilita el desarrollo social, genera un propósito de integración y de comunidad, y le permite a los estudiantes valorar su entorno y también su sentido de vida, Colsubsidio se considera como un gran ejemplo para demostrar que, con esfuerzo, continuidad y convergencia de saberes, se puede mejorar la educación en Colombia.