Educación virtual, un camino para la inclusión social
Aumentar el número de Centros de Servicio Universitario es una de las estrategias de Areandina para contribuir a cerrar brechas y mejorar el nivel de vida de los colombianos a través de la educación.
En Colombia, la inclusión social debe ser un propósito nacional que le apunte a mejorar las competencias laborales, a fortalecer el capital humano y a aumentar la productividad. Es ahí donde la educación virtual se convierte en la estrategia metodológica que facilita y permite superar obstáculos como la distancia, el acceso y la disponibilidad de tiempo al momento de emprender un programa técnico, profesional o posgradual. “Este tipo de metodologías, mediadas por las tecnologías, generan procesos de inclusión nunca antes vistos. Hoy, el país cuenta con más de 14 millones de conexiones y es nuestro reto aprovecharlas”, dice José Leonardo Valencia, rector nacional de la Fundación Universitaria del Área Andina. “Por medio de la virtualidad podemos llegar a sitios muy alejados del país y a poblaciones que no tenían la oportunidad de acceder a programas de calidad”, manifiesta. El país ha dado pasos importantes: la modalidad virtual ha crecido en un 58.3% y hoy existen 146.392 estudiantes virtuales con resultados tan buenos que cada vez han ganado mayor espacio en el campo laboral. Son individuos que se atreven a superar las brechas y que encuentran en la tecnología una herramienta para hacer realidad su sueño de obtener un título profesional. Gracias a los Centros de Servicio Universitario de Areandina, personas en Sabanalarga, Atlántico; Sahagún, Córdoba; San Andrés; Puerto Asís, Putumayo; Tuluá, Valle del Cauca; Tunja, Boyacá, por mencionar algunos municipios, tienen la oportunidad de acceder a la educación superior. Antes hubiera sido imposible sin que se desplazaran a la capital de sus departamentos. De hecho, el 12% de los estudiantes virtuales aseguran que este es su motivo principal para apostar por esta modalidad. Areandina se ha enfocado en ampliar para 2018 su oferta virtual extendiendo su red a 60 Centros de Servicio Universitario (espacios físicos de conexión a Internet, información y apoyo permanente de la oferta académica) en todo el país, para llegar así a rincones alejados donde la educación superior de calidad no está al alcance. Su compromiso va más allá: se preocupa por apoyarlos, incluso desde lo más básico, con docentes y tutores capacitados que están pendientes de los avances de los estudiantes. “En Areandina hemos desarrollado tutoriales muy sencillos para que sepan desde cómo se maneja el mouse hasta de qué manera crear contenidos dentro de los procesos disciplinares. Desconocer la tecnología no debe ser una limitante, nos encargamos de enseñarles todo lo necesario para que cumplan su sueño”, asegura el rector Valencia, convencido de que la virtualidad es la gran herramienta para minimizar las brechas de la exclusión y mejorar el nivel de vida de los colombianos por medio de la educación, sin importar en qué lugar del territorio estén.