Clásico EC acelera el retorno de Alejo
La fase final de la prueba ciclística y benéfica, la ruta, a cumplirse el fin de semana suma más participantes.
Alejandro Ramírez Calderón ya suma 35 años de edad, pero basta con verlo cabalgar en su caballito de carbono para darse cuenta que aún tiene las fuerzas suficientes para mantenerse firme entre los mejores ciclistas del pelotón nacional.
Ha sufrido severas caídas, la más reciente en la segunda fracción del Clásico RCN, en el que se vio obligado a retirarse, tres días después, debido a un fuerte dolor en la costilla y a las laceraciones en su cuerpo.
Sin embargo, ha sido más su deseo de seguir dejando huella que la pena que acarrea volver a empezar desde cero.
“El amor por el ciclismo es el que me ayuda a continuar con paso firme”, expresa el corredor antioqueño, quien reaparecerá en las carreteras en la etapa rutera del Clásico EL COLOMBIANO-Movistar-Inder, que se desarrollará este sábado, con una contrarreloj entre los cerros Nutibara y El Volador, y el domingo con un punto a punto de Caldas a Barbosa.
“Es una carrera muy linda, porque además de ser benéfica, permite la integración de la familia, no me la podía perder. En cerca de 13 veces que he participado nunca he ganado, entonces sería muy bonito festejar al lado de mis seres queridos”, dijo el padre de Violeta, de 5 años de nacida.
La vitalidad de Ramírez sorprende. Esta temporada, tras recuperarse de una fractura de clavícula que sufrió el años pasado y que lo alejó de competencias ocho meses, mostró sus dotes de escara-
bajo al ganar la cronoescalada de la Vuelta a Antioquia, y además aportó un grano de arena para que su equipo, el Coldeportes Claro-Zenú, terminara campeón de la Vuelta a Colombia, en la que ade-
más finalizó en la quinta posición de la general.
“La disciplina, dedicación y la buena preparación son la clave para mantenerse vigente. Ya hemos visto que los corredores veteranos, por su ex-
periencia, son quienes pueden marcar la diferencia en las carreras grandes. Me siento fuerte y seguiré luchando por mis sueños”, dice Ramírez, quien anhela ganar un giro nacional.
Por lo pronto se alista para
competir en el Clásico EL COLOMBIANO, en el que sabrá como está de nivel y forma antes de emprender viaje a Panamá, donde encarará la Vuelta a Chiriquí, durante la última semana de noviembre, y con la cual intentará cerrar el año de manera triunfal
“Esta carrera es muy importante porque aportamos en la causa social, además nos sirve para evaluar el nivel de nuestros corredores, que estarán en la Vuelta a Chiriquí”. JORGE ARBELÁEZ Técnico del Coldeportes Claro