MIENTRAS 17 MUNICIPIOS CHOCOANOS REPORTARON INUNDACIONES, EL GOBIERNO NACIONAL INICIÓ EL TRASLADO DE 100 TONELADAS DE AYUDA
El Ideam mantiene la alerta roja en el pacífico y la Gobernación hoy podría declarar la calamidad pública. Llegarán 100 toneladas de ayudas.
El Alto Baudó (foto) es uno de los municipios chocoanos con mayor afectación. Según las autoridades locales, 70 casas quedaron destruidas con la creciente del río Baudó. El Gobierno Nacional teme que los damnificados sean unos 25.000.
Un verdadero drama están viviendo la mitad de los municipios de Chocó luego de que los ríos Atrato y San Juan reportaran crecientes tras fuertes aguaceros que están cayendo en la región. Debido a la magnitud de la emergencia, los organismos de socorro apenas están consolidando el número de afectados, pero se teme que sean unas 25.000 personas.
Así lo dio a conocer Carlos Iván Márquez, director de la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo, Ungrd, quien en conversación con EL COLOMBIANO advirtió que la situación más compleja se está viviendo especialmente en los municipios del Medio San Juan, Sipí, Istmina, Carmen del Darién, Lloró y el Alto Baudó.
“Estamos en la etapa de la evaluación de la emergencia y lo que nos hemos encontrado es que se trata de inundaciones rápidas que pueden empezar a bajar en las próximas horas. No tenemos reporte de desaparecidos. Desde ayer estamos movilizando 100 toneladas de ayudas que tenemos presupuestado le lleguen a 25.000 personas afectadas”.
Dijo que en Quibdó se es- tableció la sala de crisis desde donde se está coordinando la atención de las comunidades afectadas. Este jueves Márquez hará un recorrido por la región para revisar los reportes de todos los municipios y tener un consolidado exacto de la afectación. Así mismo, evaluará con la Gobernación la posible declaratoria de calamidad del departamento”.
Indicó que aunque en Chocó hay capacidad de respuesta, la región sigue siendo muy vulnerable. “Este es un departamento
que por su ubicación es complejo, además, la mayoría de los municipios están en zonas inundables y en consecuencia todos tienen una vulnerabilidad alta. Afortunadamente se hicie- ron acciones de evacuación preventivas porque no se nos han presentado personas desparecidas ni fallecidas. Esto es un avance importante en la gestión del riesgo”, puntualizó Márquez.
La alcaldesa del Alto Baudó, Carmen Londoño Mosquera, dijo que están pasando momentos difíciles y pidió la ayuda del Gobierno Nacional.
“En este momento tenemos aproximadamente a unas 3.500 familias afectadas, de las cuales 1.200 son las más impactadas porque sus casas quedaron bajo el agua. Además, hay unas 70 viviendas destruidas y esas familias lo perdieron todo, no alcanzaron a sacar nada. Es triste ver cómo pierden todo en un instante”, dijo la mandataria.
Subrayó que le está haciendo un llamado a todas las instituciones para que los ayuden, ya que no estaban preparados. “Aquí en el municipio está la Cruz Roja, pero preparados para algo así, no estábamos. No había visto en el Alto Baudó algo así. Estamos tratando de atender la emergencia, pero realmente no tenemos recursos para atender a los damnificados, no los hay”.
Por último, indicó que en este momento no hay un solo
lugar seco en Alto Baudó y que en la noche del martes hubo familias a las que les tocó buscar las partes más altas del municipios “y ahí armaron sus cambuches, porque en sus viviendas ya el agua inundó todo. La verdad es que es muy triste ver cómo se derrumban las casas”.
Por último, Antonio Beltrán, líder comunitario de El Carmen del Darién, dijo, entretanto, que la situación es muy critica porque no ha parado de llover y el nivel de los ríos no ha bajado. “La mayor afectación se nos está presentando en el campo, todos los cultivos se perdieron. Aquí no ha llegado nadie a evaluar los daños”