Las gallinas no son nada bobas: hasta hacen cuentas.
Revisión de estudios demuestra sus capacidades mentales y características psicológicas similares a las de otros animales.
No son despistadas y tampoco brillan por no tener cerebro, aunque la creencia popular sea esa.
Las gallinas tienen diferentes personalidades, conocen su orden entre sus congéneres y pueden razonar por deducción, una capacidad que los niños adquieren hacia los siete años.
Lori Marino, científica senior del proyecto The Someone, una iniciativa conjunta de Farm Sanctuary y Kimmela Center, cree que la inteligencia de estas aves ha sido subestimada y opacada por otros grupos de aves.
La investigadora revisó los últimos estudios sobre la psicología, la conducta y las emociones del animal doméstico más abundante y publicó sus hallazgos en el journal Animal Cognition.
“Son percibidas como carentes de la mayoría de características que reconocemos en otros animales inteligentes y se considera que tienen un nivel bajo de inteligencia en comparación con otros”.
Incluso, agregó, la idea de una psicología en las gallinas es extraña para la mayoría.
Matemáticas
Las investigaciones han demostrado que tienen algún sentido de los números. Experimentos con pollitos recién nacidos revelaron que pueden discriminar cantidades.
También tienen idea de la ordinalidad, o sea la capacidad de poner cantidades en serie. Los pollitos de cinco días de nacidos a los que se les presentaron dos grupos de objetos de diferentes cantidades que desaparecían detrás de
dos pantallas eran capaces de rastrear cuál escondía el número mayor, aparentemente mediante una forma matemática simple de suma y resta.
Así mismo son capaces de recordar la trayectoria de una pelota oculta durante más de tres minutos si la ven moviendo y más de un minuto si no ven el desplazamiento. Su desempeño es similar al de la
mayoría de primates bajo condiciones similares.
Autocontrol
La investigadora citó que las gallinas tienen autocontrol cuando se trata de esperar para tener una mejor recompensa alimenticia, siendo a la vez capaces de evaluar su posición en el grupo. Estas características son un indicati-
vo de autorreconocimiento de acuerdo con el estudio.
“Un cambio en cómo preguntamos cosas acerca de la psicología y comportamiento nos llevará sin dudas a datos más precisos y ricos para tener un entendimiento más auténtico de quiénes son en verdad”, indicó Marino.
Las gallinas, animales más complejos de lo pensado