1. UN AÑO DE GRANDES RETOS
¿Cuál es su gran balance para su primer año de gestión? “Afortunadamente, la empresa mostró una gran solidez, ante dos eventos de alto impacto: un fenómeno de El Niño prolongado y el accidente de Guatapé. Pese a esto, los resultados son superiores en un 15 % a los del año anterior, en ingresos y en utilidades. La estructura financiera de la empresa se mantiene en la directriz que asumimos con los acreedores. Mantenemos la deuda muy saludable. El gran balance es solidez, eso demostró EPM en 2016”.
En cifras: ¿de cuánto será la utilidad para 2016? “Cerraremos por encima de 1,7 billones de pesos, cuando la meta era de 1,48 billones de pesos y se trata de la cifra más alta de ganancias en la historia de la empresa”.
¿Qué factores fueron los que potenciaron ese crecimiento? “Lo importante de EPM es que su solidez parte de la diversificación geográfica y de productos. El negocio de transmisión, de aguas y de gas ayudaron cuando el de generación de energía tuvo un mal momento”.
Y las transferencias al Municipio, al dueño... “Transferiremos 55 % de las utilidades, es decir que podríamos estar hablando entre 900 mil millones y un billón de pesos al año. Esto es adicional a los recursos que se les darán por la venta de la participación de EPM en Isagén”.
Adelántenos cómo viene 2017... “La dinámica económica no será la mejor, no será muy positiva. Los crecimientos serán muy tenues. Vamos a tener cifras muy similares a las de 2016, sobre 1,7 billones de utilidad”.
Pero la deuda ha sido un nicho de críticas, ¿cómo estará esa deuda saludable de la que habla? “Queremos decirle a la comunidad que EPM está a toda máquina invirtiendo en Colombia. Pero hay que entender que estos proyectos se hacen con recursos propios y financiamiento. Ya tenemos todos los recursos para el plan de inversión de 2017, no tenemos problemas de fondeo”. ¿Cuáles son esos focos de inversión? “A la construcción de la central hidroeléctrica de Ituango hay que invertirle 3,5 billones de pesos en los próximos dos años. La planta de tratamiento de aguas residuales (Ptar) de Bello necesita 500 mil millones de pesos. A la línea de transmisión Bello-Guayabal-Ancón le faltan 100 mil millones de pesos por invertir. Para los próximos 10 años queremos renovar y crecer la infraestructura de alcantarillado y agua. Esa inversión necesita crédito y caja”.
¿Cómo está distribuido ese plan de inversiones? “El plan de inversiones para los cuatro años que vienen es de 7 billones de pesos y para 2017 es de 2,5 billones de pesos, por eso tenemos el indicador de deuda sobre Ebitda de 3,5 veces y es muy conservadora. Queremos que EPM tenga confiabilidad y un perfil de riesgo muy conservador para nuestros acreedores. En 2015 cerró en 2,8 veces, y este año estaremos en 3,6 veces. Luego estabilizaremos dos años en 3,5 veces porque necesitamos mucho dinero para invertir”.