Las víctimas, como santos de hierro
En su muestra de esculturas, la artista Martha Lucía Villafañe propone nuevos santos colombianos.
Cada día tiene sus santos, beatos y mártires en el calendario católico. Hoy, por ejemplo, es día de san Anselmo de Nonántola, santa Cunegunda, san Eutropio de Amasea, santa Teresa Eustoquio Verzeri, santa Artelaides y otros. Ahora, la escultora Martha Lucía Villafañe trae los suyos y los suma a este grupo de personas distinguidas.
Los propone en la exposición Para el nuevo santoral colombiano I, en la Cámara de Comercio de Bello.
Sus santos son también mártires. Víctimas de conflictos y de la delincuencia. En ese santoral propio ella tiene a Rosa Elvira Cely, la mujer que fue violada y asesinada por Javier Velasco la madrugada del 24 de mayo de 2012 en el Parque Nacional de Bogotá. Rosa Elvira, humilde y colmada de carencias materiales, era vendedora de golosinas, se ocupaba del sostenimiento de su mamá y de su hija. Por esos días validaba el bachillerato.
Ana Fabricia Córdoba, mujer chocoana desplazada por los paramilitares en 2001. Asesinada en 1011 presuntamente por denunciar a violentos.
Yolanda Izquierdo, cordobesa, presunta víctima de las Autodefensas después de que se desmovilizaron.
Lina Maritza Zapata, la aspirante a alferez de la Policía, cuya vida terminó en un extraño suicidio tras los hallazgos que hizo de la supuesta red de prostitución masculina de esa institución, que han denominado Comunidad del Anillo.
Marjorie Kisner, una psicóloga que atendía a expresidiarios, fue asesinada por uno de ellos en 2008.
Y Camilo Torres Restrepo, el sacerdote seguidor de la teología de la liberación, líder social y muerto en la revolución.
“Los santos — dice Martha Lucía— no tienen que ser personas con dones sobrenaturales. Son seres humanos que hacen las cosas bien. Por ejemplo, la virgen María era una madre amorosa; estas personas que recuerdo en mi exposición fueron víctimas y mártires. Trabajaban por los demás”.
La artista hace vigentes las palabras de monseñor Jorge Aníbal Rojas Bustamante, juez Delegado en nueve procesos de canonización, entre ellos el de la Madre Laura:
“Hay santos caminando por las calles; santos manejando taxi, santos por todas partes. Lo que sucede es que no conocemos su vida ni sus acciones”.
Dibujos de hierro
Los personajes hechos arte en la mente y las manos de Villafañe son sometidos a un proceso de reflexión estética, si se puede decir así, puesto que primero son mostrados desde el retrato y luego en ícono, con líneas de hierro. Las facciones son logradas mediante el doblaje de las varillas.
Algunas figuras tienen, además del hierro, materiales más dóciles como bejuco, mimbre o tejido plástico de encerramiento de animales. Hay santos vestidos con telas de tul y pergamino.
Quien ve las piezas a cierta distancia, bien puede creer que son dibujos hechos a lápiz sobre el fondo blanco de las paredes.
“Siempre me han gustado el hierro, el cemento y los materiales rudos. Tienen menos prestigio que el bronce, son más humildes y, como tales, encierran gran dignidad”