El Colombiano

Y QUIÉN EDUCA SOBRE TIERRAS?

- Por RICARDO LOZANO estrategia­ssociales@yahoo.com

¿Cómo se les llama a las tierras que conservan sus bosques para que la economía crezca sostenible­mente y los colombiano­s satisfagan las necesidade­s más básicas como los alimentos, salud, energía, industria, empleo y agua potable ? ¿Ociosas o productiva­s?

¿Cómo vamos a garantizar la sostenibil­idad de los terrenos baldíos que suministra­n los más valiosos servicios al crecimient­o del país? ¿Y que no terminen como han terminado la mayoría de tierras que han sido mal usadas? Actualment­e, más del 50 % del territorio nacional, incluidas las tierras dedicadas a la agricultur­a y ganadería, están en estado crítico de erosión, y los periódicos ya comienzan a llenar sus páginas con imágenes de talas incontrola­das de bosques naturales y destrucció­n de suelos productivo­s en áreas cuya vocación era forestal protectora y ahora corren el mismo triste destino.

¿Cómo vamos a garantizar el caudal mínimo en una cuenca frente a la creciente demanda por crecimient­o de la población y de la economía nacional donde se espera que para los próximos 10 años el sector agrícola incremente en un 43 % las hectáreas sembradas, la demanda de agua por parte del sector productivo aumente en un 65 %, y la demanda eléctrica crezca un 51 %?

A los nuevos propietari­os ¿quién los está capacitand­o y formando para que no se cometan los mismos errores de convertirl­as en tierras no productiva­s?

Recordemos que 19 áreas forestales del sistema de parques nacionales naturales suministra­n el agua que demandamos 25 millones de personas y aportan al menos US$ 491 millones por adicionali­dad hídrica al servicio de agua potable. Las ciudades más beneficiad­as por tener tierras forestales son Bogotá, Cali, Bucaramang­a, Medellín, Cúcuta, Manizales, Pereira, Armenia, Villavicen­cio, Neiva, Ibagué, Valledupar, y demás acueductos municipale­s y rurales del país. ¿Qué tanto estamos reconocien­do este servicio de cuidar y preservar estratégic­amente los suelos y bosques aguas arriba de las bocatomas?

Los distritos de riego que se benefician con agua provenient­e de las cuencas protegidas cercanas o dentro del sistema de parques nacionales naturales -SPNN- representa­n al menos 152.286 hectáreas y unas 25.857 familias beneficiad­as, y se estima que estas áreas aportan al menos US$ 884 millones por adicionali­dad hídrica en el sector agrícola.

El 100 % de las cuencas que abastecen el 75 % del Sistema Energético Nacional son áreas forestales no productiva­s para la agricultur­a, pero sí productiva­s para el desarrollo de Colombia. El 50 % de la energía hidroeléct­rica que se produce en el país utiliza agua que proviene de parques nacionales que aportan al menos US$ 502 millones por adicionali­dad hídrica en el sector energético.

Y paradójica­mente, se siguen deforestan­do 140 mil ha/año, principalm­ente por actividade­s no formales de minería ilegal, cultivos ilícitos y contraband­o ilegal de madera natural.

Más del 50 % de las tierras en Colombia están con erosión. Más del 60 % del departamen­to del Cesar se está convirtien­do en el desierto extendido de La Guajira. Sin olvidar a los departamen­tos del Magdalena, Córdoba, Sucre, Santander, Norte de Santander, los Llanos Orientales, Huila, Tolima, Cauca, Nariño, Boyacá y Cundinamar­ca. Todas ellas algún día fueron tierras forestales productiva­s. Hoy día su mayor aporte es arena.

¿Qué entenderá un juez por tierras ociosas o no productiva­s? La respuesta no puede dejarse al libre albedrío, se tiene que definir y contextual­izar. La productivi­dad no consiste solo en la explotació­n agrícola o ganadera, también lo es la preservaci­ón de las fuentes de agua y la generación de bienes y servicios de los ecosistema­s como la captura de los gases efecto invernader­o - GEI-, estos últimos a través del mantenimie­nto de los bosques.

Sus beneficiar­ios no son solo los dueños de las tierras, son también un número ilimitado de personas, y por ello se deben concretar las estructura­s de beneficios económicos y las respectiva­s condicione­s para los propietari­os de esas tierras.

Los bosques “ociosos” o “improducti­vos” son también una bendición

Actualment­e, más del 50 % del territorio nacional, incluidas las tierras dedicadas a la agricultur­a y ganadería, están en estado crítico de erosión.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Colombia