Las empresas mineras deben hacer propuestas inteligentes para extraer los recursos del país
En el desarrollo de proyectos mineros juegan muchos factores. En esto, todos estamos aprendiendo, pero resulta necesario hacer una aproximación temprana en los territorios con ese potencial. A la gente le asustan los impactos de esta actividad, y no comprenden que antes de establecer una mina hay una fase exploratoria y de estudios. Las discusiones en Cajamarca (Tolima), donde AngloGold Ashanti busca establecer una mina de oro, se dieron sin que hubiera una licencia. Todo lo que rodea el proyecto de La Colosa es un imaginario, no hay una licencia ambiental para esa iniciativa. De todo lo ocurrido, quedan unas lecciones de cómo es que se debe llegar al territorio. Las empresas deben ser capaces de hacer ese proceso con las comunidades, ir y decirles del potencial. Hacerles entender que son necesarias mediciones para calcular el nivel del recurso, y elaborar modelos económicos que permitan hacer propuestas inteligentes de como desarrollar las iniciativas. El grado de desinformación que surge frente a las posibilidades de un proyecto minero termina siendo la fuente con que las comunidades resuelven sus inquietudes. Un caso positivo lo hemos visto en Santa Rosas de Osos, Norte antioqueño, donde Red Eagle Mining adelantó un proceso organizado, involucrando a la comunidad y donde se ha visto a una compañía capaz de explicar toda la historia. El caso de Buriticá (Occidente antioqueño), donde Continental Gold construye una mina, refleja una transición, porque allí si había un problema de ilegalidad. Lo que uno oye de los alcaldes de Buriticá, Cañasgordas y Giraldo es que hay plena seguridad de los efectos positivos en toda la comunidad si se formaliza la actividad. La en- trada en operación de proyectos grandes como Buriticá cambiarán significativamente las cifras del sector minero. Santa Rosa de Osos y Buriticá son ejemplos que demuestran que el trabajo temprano con las poblaciones es clave, para evitar que la gente se llene de desinformación y de los mitos de redes sociales. Es así como aparecen en algunos proyectos ataques contra las empresas, pero el mensaje para AngloGold y otras que están teniendo estos problemas es que hay aprendizajes que les posibilitaría lograr consensos. En las primeras etapas de un proyecto minero juegan un papel importante el Estado y las empresas, pues de manera conjunta se deben armonizar actividades de socialización con la conservación y protección del medio ambiente, con el amparo de la integridad social y económica de la región y con el respeto de los derechos constitucionales de comunidades que habitan en el área de influencia de los proyectos. Diría que necesitamos construir confianza entre las partes involucradas, entre los gobiernos nacional, regional y municipal, así como entre el sector productivo y las comunidades. Debemos lograr espacios participativos en el desarrollo de proyectos mineros y realizar campañas de información y socialización para contar bondades y beneficios económicos y sociales que genera la minería. Seguimos trabajando para consolidar un sector minero organizado, legítimo, incluyente y competitivo, generador de desarrollo que servirá de apoyo para el apalancamiento del posconflicto. No podemos olvidar que la minería bien hecha genera cerca de 1,75 millones de empleos y en los últimos cinco años, le ha aportado al país, solo en regalías, más de 10 billones de pesos.