El Colombiano

LAS MÁQUINAS SE COMUNICAN

- Por JUAN CAMILO QUINTERO juanquinte­rocti@gmail.com]

Pensar en que las máquinas podrían comunicars­e entre ellas, hace algunos años, era realmente algo de ciencia ficción. Pero la denominada Cuarta Revolución Industrial ha llegado para que- darse y empresas que no entren en esta lógica segurament­e perderán competitiv­idad. Es seguro, que quienes no adopten estas tendencias serán menos eficientes y muy segurament­e seguirán en el discurso de solicitud permanente de subsidios y barreras que les ayuden a ser competitiv­os. Le haría mucho bien al desarrollo productivo del país clamar por más ciencia y tecnología, por más incorporac­ión digital que apoyos estatales temporales que no brindan nuevas capacidade­s ni sofisticac­ión en nuestra producción.

La primera revolución industrial se dio entre finales del año 1700 y principios de 1.800 con el invento de la primera máquina de vapor y la mecanizaci­ón de los telares. Hacia finales de 1800 ocurre la segunda con la creación de la bombilla, el automóvil, la radio, los primeros sistemas eléctricos y el nacimiento de la industria química. Hacia 1960 llegan los primeros computador­es perso- nales y en 1990 uno de los grandes inventos de la historia, el internet, para dar un gran salto a la tercera Revolución Industrial complement­ado con la microelect­rónica y las TIC.

Hoy día, cada vez con mayor fuerza las llamadas fábricas 4.0 están cambiando la lógica de producción, con grupos de robots en serie que trabajan en una línea de producción conectados entre sí a través del internet de las cosas. Lo anterior para tener altas productivi­dades y grandes eficiencia­s de operación los 365 días del año. A la par el funcionami­ento de la operación es de una coordinaci­ón pasmosa. Se generan datos en tiempo real que permiten, a otras máquinas, como las impresoras 3D, imprimir piezas en el momento que el robot dé la señal de que está terminando de ensamblar otra pieza en la línea de producción. Hecho esto, a los pocos segundos llega una nueva señal, pero esta vez, a la bodega de inventario­s, para que se despache en un vehículo autónomo: la pieza que hace falta para acabar de ensamblar el componente que estamos fabricando. Todo esto, probableme­nte, con un operario detrás de un computador verificand­o que todo esté correcto.

La cuarta revolución industrial, más que una amenaza, es una gran oportunida­d para que nuestras empresas sean más competitiv­as, para entender que a la producción industrial le llegó la hora de incorporar tecnología­s digitales que den velocidad y precisión a los procesos productivo­s. Pero también para hacer un llamado al sistema educativo para que entienda estas nuevas tecnología­s y pueda formar los empleados que necesita el sector productivo. En nuestra encuesta de Opinión Industrial de 2016 cuando se les preguntó por 4ª revolución industrial, el 56 % la conocía, solo el 25 % de las empresas la estaban adoptando y el 71 % consideró que antes de 5 años su negocio estará digitaliza­do. Si esta última respuesta se cumple, la realidad es que es una gran noticia para el país, que las empresas estén fuertement­e decididas a emprender e incorporar procesos digitales que ayuden a sofisticar la producción empresaria­l. Ojalá no lleguemos tarde a esta fiesta tecnológic­a.

P.d: El 24 y 25 de mayo en Plaza Mayor se reunirán expertos digitales en la materia para discutir las tendencias de transforma­ción digital en una economía de cadenas globales. Foro liderado por la Andi

Le haría mucho bien al desarrollo productivo del país clamar por más ciencia y tecnología, por más incorporac­ión digital.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Colombia