Odebrecht, la prueba para anular a Temer
La validez probatoria de la confesión del grupo Odebrecht, que admitió haber financiado ilegalmente la campaña electoral de la destituida Dilma Rousseff y el mandatario Michel Temer, atascó ayer el juicio que puede sacar del poder al gobernante.
El proceso que tramita en el Tribunal Superior Electoral sobre la presunta financiación ilegal de esa campaña de 2014 dedicó casi toda la sesión a analizar el rol de Odebrecht en esos hechos, pero sobre todo puso en tela de juicio la validez de la confesión,.
Las defensas de Temer y Rousseff demandaron la nulidad de las pruebas recogidas por la constructora, alegando que fueron introducidas durante el curso del proceso y no constaban en la acusación inicial, y que se trata de simples “delaciones no comprobadas”.
En los testimonios que prestaron a la justicia, los exdirectivos de Odebrecht confesaron que el grupo entregó al menos 45 millones de dólares para la campaña de la formula Rousseff-Temer.
El instructor del caso en la corte electoral, Herman Benjamin, se negó a que esos testi- millones de dólares habría dado Odebrecht a la campaña Rousseff-Temer
monios sean anulados, insistió en que integran toda la trama que se investiga y señaló que es “más que público” que esa financiación ilegal de Odebrecht es parte “central” del proceso.
El debate sobre ese punto continuará hoy, cuando el Tribunal Superior Electoral pretende concluir el proceso, aunque el propio presidente de la corte, Gilmar Mendes, avisó que puede convocar sesiones extraordinarias.
En el juicio está en riesgo la continuidad de Temer en el poder que heredó de Rousseff el año pasado, cuando la entonces presidenta fue destituida por irregulares manejos de los presupuestos.
Si hubiera una sentencia condenatoria, la victoria de la fórmula Rousseff-Temer en los comicios de 2014 sería anulada y el Congreso debería convocar a una elección parlamentaria indirecta