Ataque a diputados prevé mes de violencia
Colectivos afines al Gobierno agredieron a diputados el día en que avalaron el referendo del 16 de julio.
Grupos chavistas arremetieron contra el Legislativo venezolano para amedrentar a la oposición. ¿Qué encierra esto?
El mismo día en que se suponía que Venezuela celebraría 206 años de su independencia, terminó en enfrentamientos, violencia, sangre y lamentos. La tragedia del país vecino se evidencia fuera de control, y el ataque de ayer contra una institución fundamental de la democracia augura un mes complejo para los venezolanos.
La Asamblea Nacional (AN) fue tomada por colectivos paramilitares chavistas, que agredieron con objetos contundentes a por lo menos cinco diputados de la oposición y lanzaron bombas lacrimógenas dentro del Hemiciclo.
La Guardia Nacional Bolivariana, que tiene efectivos en el Palacio Federal Legislativo para resguardarlo, no apareció con prontitud, por lo que entre los mismos diputados y sus esquemas de seguridad tuvieron que enfrentar a los fanáticos hasta que los lograron expulsar del Hemiciclo. También, para evitar ataques, bloquearon las puertas con alfombras y mesas, por lo que permanecieron horas enclaustrados en el lugar.
Día polarizado
En diálogo con EL COLOMBIANO, el opositor Omar González, diputado a la
Asamblea Nacional, explicó que las provocaciones iniciaron desde muy temprano, a pesar de que el ataque se dio cercano al mediodía.
“Sobre las 8: 00 a.m, entró al Palacio Federal Legislativo el vicepresidente Tareck El Aissami, acompañado del ministro de Defensa, Vladimir Padrino López, pero no venían al frente de militares, ni de funcionarios, sino de los paramilitares que acá llamamos colectivos. Hicieron un acto en el Salón Elíptico —donde está el Acta de Declaración de la Independencia del país, firmada el 5 de julio de 1811— y luego se retiraron”, relató.
Tras eso la Asamblea Nacional realizó la sesión extraordinaria en la que aprobó la convocatoria al referendo del 16 de julio. No obstante, los colectivos seguían en los alrededores de la sede legislativa, y cuando ya el Parlamento realizaba una sesión ordinaria se produjo la irrupción.
Según el presidente de la AN, Julio Borges, los diputa- dos heridos fueron cinco: Juan José Molina, Armando Armas, Américo de Grazia, Richard Blanco, y Juan Guaidó, además de siete trabajadores. Esta lista creció, ya que la Asamblea Nacional informó a través de las redes de agresiones contra los diputados Luis Carlos Padilla, Leonardo Regnault y Nora Bracho.
“Américo de Grazia sufrió el ataque más bestial. Quedó en el piso convulsionando por contusiones graves. Esto parecía una sala de hospital, y por fortuna los heridos fueron evacuados. Pero ahora seguimos secuestrados, no hemos podido salir, ya que los colectivos siguen en las inmediaciones y no se ve fuerza pública que nos proteja. Todavía suenan explosiones”, agregó González a este diario minutos después de los hechos.
Indicio de lo que sigue
Un dato aportó el diputado González que le parece sospechoso. Los colectivos utilizaron granadas lacrimógenas de fabricación brasileña, algo que atribuye al régimen (ver galería). Es decir, no se habría tratado de una acción planeada por simpatizantes, sino que esta tendría apoyo desde mandos chavistas.
¿Cómo interpretan expertos este hecho al inicio de un mes que se anticipa conflictivo? Jesús Castillo Molleda, politólogo y docente de la Universidad del Zulia, considera que “sería inocente pensar que el gobierno no está enviando mensajes con esto a aquellos que se oponen. Más en un mes en el que hay agenda de calle y votaciones. Está diciendo que cuenta con los colectivos. Su meta es fortalecer esa estrategia para minimizar a sus adversarios de aquí al 30 de julio”.
Para Miguel Ángel Román, periodista del programa Café
y Noticias, esto es lo que hará el chavismo el día 16, “amparado por grupos violentos, paramilitares, y al margen de la ley, para repeler a los opositores. El objetivo es intimidar, mostrando que si eso hace contra el liderazgo opositor, igual podría hacer contra quienes salgan a votar”