1,43 millones viven en la pobreza en Antioquia
Medida solo por ingresos, en 2016 bajó a 21,9 % y la tasa de indigencia a 6,6 %, según las cuentas del Dane.
Si usted vive en Antioquia y el año pasado tuvo ingresos mensuales individuales superiores a 246.012 pesos (8.200 diarios), entonces no hace parte de los 1,43 millones de habitantes que estuvieron por debajo de ese monto en que traza la línea de pobreza monetaria el Dane, según las proyecciones de población y los resultados del informe por departamentos que recién publicó para 2016.
Según la entidad, un hogar antioqueño compuesto por cuatro personas, fue clasificado como pobre si su ingreso estuvo por debajo de 984.048 pesos, es decir, no alcanza para comprar una canasta de bienes básicos, alimentarios y de otro tipo.
Con ese rasero, la tasa de pobreza, medida solo por ingresos, fue del 21,9 % de la población de Antioquia, la más baja alcanzada hasta ahora, según la serie histórica del Dane, y que contrasta con el leve repunte que tuvo el indicador nacional, que aumentó a 28 % (ver gráficos).
Además en Antioquia se registró la quinta tasa más baja entre 24 departamentos, incluido Bogotá. Esto significa una reducción de 1,8 % frente al indicador de 2015, cuando hubo 1,53 millones de antioqueños en la pobreza, con una tasa de 23,7 %. Así que salieron de la pobreza, por ingresos, 99 mil antioqueños (ver gráficos).
De esa manera, el departamento fue el sexto con mayor reducción, la cual lideró Caquetá (-5.5 %), seguido de Boyacá (-3,4) y Chocó (-3). El avance de la región contrasta con el aumento de la pobreza monetaria en departamentos pares como el Valle (22,6 %), Santander (18), Cundinamarca a (17,3) y Atlántico (25).
¿Qué hay detrás?
Este mejor desempeño se explica por un mayor crecimien- to de la economía antioqueña en 2016, a pesar de la desaceleración que viene desde 2015. De hecho, el producto interno bruto (PIB) departamental se expandió 2,6 %, por encima del promedio nacional (2 %).
También hay que tener en cuenta que Medellín y su área metropolitana concentra un 54,33 % de los habitantes del departamento, es decir, 3,55 millones. Las mediciones disponibles del Dane para el Valle de Aburrá arrojan que la tasa de desempleo se mantuvo estable en 10, 7 % en 2016 frente a un año atrás, a pesar del menor crecimiento productivo.
“Vemos que a pesar de una menor dinámica de la economía regional, en la ciudad la desocupación no subió y el sector privado trató de conservar puestos de trabajo. Eso facilita que la tasa de pobreza mantenga su senda descendente”, comentó Ramón Javier Mesa Callejas, profesor de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Antioquia.
A este aspecto, agrega el analista la incidencia que ha tenido en la población más vulnerable de Antioquia, especialmente en el sector rural, de los programas sociales públicos de orden nacional, departamental y municipal.
“Un mayor gasto público social y una mejor focalización en familias de menos recursos, sin duda ayuda a amortiguar la precariedad de sus condiciones y facilita que estén por encima de la línea de pobreza”, agregó el analista.
Pobreza extrema
Lo anterior va en línea con la reducción de la tasa de indigencia (pobreza extrema), que padecen quienes no alcanzan a tener el ingreso para atender las necesidades mínimas calóricas (de alimentación).
Según el Dane, en Antioquia bajó de 7,3 % a 6,6 % la tasa de indigencia, que se traduce en que hubo 431 mil personas que vivieron con un ingreso mensual por debajo de 113.694 pesos, a razón de 3.790 pesos diarios. Eso quiere decir que salieron de la pobreza extrema 40 mil habitantes frente a 2015.
De esa manera, el departamento se mantuvo con la séptima tasa más baja entre los 24 medidos por el Dane, de tras de, obviamente, la capital (2,3 %), y otros departamentos comparables como Atlántico (3,1), Santander (4,7) y Valle (6,2).
Asimismo, Antioquia tuvo la sexta mayor reducción de este indicador entre los nueve departamentos con esa tendencia que encabezó Chocó, con una reducción de 2,4
%, pero con una incidencia de 34,7 % de su población. Entre tanto, la pobreza extrema tuvo su mayor incremento en Cundinamarca (1,4 %), Meta (1,7) y Sucre (2,6).
Desigualdad baja poco
Con una reducción en las tasas de pobreza e indigencia, Antioquia avanzó levemente en la menor desigualdad de ingresos, medida por el coeficiente Gini, en que más cercano a 1 indica mayor concentración de riqueza.
Así se tiene que tal indicador pasó de 0,521 (2015) a 0,508 (2016), inferior por poco al promedio nacional (0,517), siendo el séptimo departamento con menor desigualdad y ocupó igual lugar entre los 19 que registraron una reducción.
“Estos resultados denotan que hubo una caída de ingresos en los sectores que tradicionalmente han tenido mayor ingreso, lo que se puede asociar a una economía más lenta en su crecimiento”, concluyó Mesa Callejas
“Los programas sociales del Gobierno y el Departamento favorecen que haya una reducción de la pobreza por ingreso”. RAMÓN JAVIER MESA CALLEJAS Profesor de Economía - U. de Antioquia