LA LEY CHAVISTA “CONTRA EL ODIO Y LA DISCRIMINACIÓN”
La Asamblea Nacional Constituyente del chavismo, que usurpó a la brava las competencias legislativas de la Asamblea Nacional (donde había mayoría opositora democráticamente elegida), formalizó esta semana la expedición de una norma denominada “Ley Constitucional con- tra el odio, por la convivencia pacífica y la tolerancia”.
Más que el texto, que en ciertos pasajes puede ser similar a leyes expedidas y vigentes en otras latitudes (como la ley 1482 de 2011, de Colombia), hay que atender las declaraciones de los funcionarios del régimen de Nicolás Maduro, que la han presentado de forma clara como una ley que se aplicará contra los opositore0s. Delcy Rodríguez, la excanciller de Maduro y hoy presidenta de la Asamblea Constituyente, ha dicho que “esta es una ley anticapitalista, porque el capitalismo niega la igualdad entre las personas”. Lo dice ella, que preside una asamblea ilegítima donde solo fueron elegidos miembros del chavismo. Como en Animal Farm, de George Orwell, “todos somos iguales, pero unos somos más iguales que otros”.
Pero el fundado temor de los demócratas y defensores de las libertades civiles está en que el Gobierno y sus aliados dicen expresamente que esta ley castigará “al fascismo y a los fascistas”. Así es como se refieren Maduro y sus funcionarios a los opositores. Ser opositor en Venezuela es “ser fascista”. Ese sí que es un discurso de odio, que termina promoviendo el exterminio moral de los demócratas