La cuenta regresiva de la sexta extinción
El CO2 y las acciones humanas aceleran la desaparición de especies. El proceso será largo.
Si el rumbo del planeta sigue como hoy, en 2100 se habrá cruzado el límite de seguridad para la vida en la Tierra.
En ese momento, los niveles de dióxido de carbono fortalecerían la extinción de especies, un proceso que se aceleró desde los comienzos del siglo pasado.
La sexta extinción. Una que duraría al menos 10.000 años con consecuencias insospechadas, incluso para la vida humana.
A esa conclusión llegaron investigadores, como Daniel Rothman, del MIT, tras analizar el ciclo del carbono en los pasados 541 millones de años, estudio publicado en Science Advances. En las cinco grandes extinciones masivas (ver recuadros) el CO2 en la atmósfera estaba disparado y ese nivel se tendrá en 2100.
Ese proceso se dispararía, por condiciones climáticas a finales de siglo, pero por otras acciones humanas, como la sobrepoblación, la destruc- ción de los hábitats y la contaminación. La sexta extinción está en curso hace varias décadas. Tal vez siglos.
Es la sexta aniquilación, en palabras de Gerardo Ceballos, Paul Ehrlich y Rodolfo Dirzo, quienes presentaron sus conclusiones en Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS).
Los hallazgos son claros al tomar una muestra de 27.600 especies de vertebrados, consideradas además las extinciones y amenazas de acuerdo con la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN): entre 1900 y 2015 ocurrieron reducciones elevadas de poblaciones en 177 especies de mamíferos.
“Encontramos que la tasa de pérdida de poblaciones de vertebrados terrestres es muy alta, incluso en las de ‘ baja preocupación’ de la UICN: 32 % de las 27.600 especies están reduciéndose. Todas han perdido 30 % o más de su distribución y 40 % experimentan severas reducciones de sus poblaciones.
Son extinciones y extirpa- ciones que afectarán el funcionamiento de los ecosistemas y sus servicios, sobre los que se apoya la civilización.
Estimativos conservadores sostienen que en los últimos 100 años desaparecieron casi 200 especies de vertebrados, unas dos por año. Parece poco para la vida humana, pero ninguna extinción ocurre en el lapso de un siglo o menos.
“En los últimos 2 millones de años, la pérdida de esas 200 no habría tomado 100 años sino más de 10.000 para desaparecer”, escribieron los investigadores.
Vertebrados que hace unas décadas estaban seguros, hoy están en peligro. De los gue- pardos quedan menos de 7.000 individuos, menos de 5.000 orangutanes de Borneo y Sumatra, del león quedan 57 % de los individuos que había en 1993. Hasta las jirafas perdieron más de 20.000 individuos en solo 20 años.
El límite histórico del CO2 hallado por Rothman son 310 gigatoneladas de CO2 adicionadas a los océanos en las grandes extinciones del pasado y esa cantidad se alcanzará de nuevo a 2100, cuando la vida entrará en terreno desconocido, tal vez acelerando la tasa de extinciones. Un desastre que tomaría cientos o miles de años, con consecuencias difíciles de prever.
A ese límite se puede llegar de modo constante como en la actualidad o súbito, por otro fenómeno, pero lo que ocurre hoy no parece dejar dudas: estamos en la sexta extinción. Qué tanto durará es la pregunta.
Fuentes: BBC, LiveScience, MIT, PNAS, Science Advances, Wikipedia