Competir no es un juego para estas consolas
Microsoft, Sony y Nintendo están conquistando a los gamers con sus lanzamientos de fin de año.
Hace 20 años, cuando las consolas de videojuego se convirtieron en el juguete que todos los niños querían, se decía que cada vez los juegos serían más inmersivos, tanto que quien tuviera el control en sus manos se iba a sentir casi como parte del mundo que se veía a través de la pantalla.
Hoy, con imágenes 4k y de Alto Rango Dinámico (HDR), sets de realidad virtual y televisores de última tecnología, la experiencia se aleja de los pixelados gráficos con los que los adultos de ahora crecieron.
Para los gamers, esos que no paran de jugar videojuegos, este 2017 será recordado como un año de grandes lanzamientos. Las empresas líderes de la industria –Nintendo, Sony y Microsoft– presentaron su dispositivo insignia: el Switch, el Play Station 4 Pro y el Xbox one X, respectivamente.
Cada una tiene su público y genera pasiones entre los seguidores, esos fans que los califican como el mejor entre todos y el que da la mejor experiencia. Su lealtad puede ser tanta que se niegan a coger un control que pertenezca a la competencia.
Las diferencias entre estas consolas insignia se ven y se sienten (ver gráfico). Si de gráficos se trata, el PS4 y el Xbox One X son enemigos directos. En la primera ronda, es decir, en las versiones predecesoras a las de este año –el PS4 Pro y el Xbox one X–, la consola de Sony se destacó porque se podía jugar a una resolución más alta que la de Microsoft.
“Además también eran mejores sus FPS (fotogramas por segundo, según sus siglas en inglés)”, comenta Sergio Pulgarín, ingeniero electrónico.
Una comparación hecha por la página de videojuegos ING demostró ese dato que cuenta el ingeniero: las resoluciones nativas y los cuadros por segundo de los juegos de PS4 eran, en algunos juegos, superiores. No obstante, se comprobó que muchos títulos se ven iguales con ambas consolas, pues esa calidad de la imagen igual depende de los fabricantes de los juegos.
Ambas consolas –PS4 y Xbox One– tuvieron su evolución este año, primero la PS4, que lanzó su versión Pro, y después Xbox one, que le sumó una x a su nombre.
Como los gamers lo esperaban, el avance en ambas fue
muy significativo y por lo tanto la experiencia de juego más prometedora.
¿Por cuál decidirse?
Según Pulgarín, quien elige una consola no lo hace únicamente por sus capacidades técnicas o diseño, influye qué dispositivo tienen sus amigos. Esto con el fin de jugar en línea, es decir, que se conectan al juego por medio de una señal de internet y pueden encontrarse en él así estén en diferentes lugares.
“La escogen por los títulos exclusivos que salen para cada una: Uncharted o The Last of Us, son dos populares entre los de Sony”, comenta el ingeniero.
Sobre el Switch, la de Nintendo que salió a la venta este año, Pulgarín destaca que al comienzo no había mucha esperanza en ella, no obstante, señala que quienes la fueron comprando notaron que era mucho mejor de lo que se esperaba, y por lo tanto los comentarios positivos se multiplicaron. Ese éxito de Switch, cuenta él, se debe en gran parte al del juego Zelda Breath of The Wild, que según el portal GameStop, a mayo de este año vendió más que la misma consola: 2.76 millones de copias por 2.74 millones de unidades.
“El Switch no es tan poderoso en gráficos y en procesamiento como las otras dos. El enfoque de Nintendo no es potencia sino experiencia de juego”, explica Sergio Pulgarín.
No es el más potente, reconoce Santiago Rodríguez, ingeniero matemático y gamer. Para él, el nuevo Xbox “se lleva
por encima a otras consolas”, así el PS4, asegura, sea el que más vende.
Para Rodríguez, la mayor ventaja que tiene el Switch frente a su competencia es la portabilidad, una promesa que le cumplieron a los usuarios que esperaban con qué saldría la popular Nintendo este año.
La compañía japonesa prometió tres modos: televisor, portátil y sobremesa, pero para el ingeniero matemático solo hay dos útiles: el portátil y el de TV, pues el otro, según él, tiene un problema de diseño: “La entrada USB- C, que es para cargarla, queda en la parte de abajo, entonces si se pone en la mesa se bloquea”.
Y así no sea la más potente y tenga un problema de dise- ño, Rodríguez se decidió por ella, es con la que pasa parte de su tiempo libre y lleva por toda su casa; lo convenció, sobre todo, por sus juegos entretenidos e inmersivos. “Nintendo los hace muy bien”, reconoce.
Uno de ellos es The Legend of Zelda Breath of the Wild, el principal aliciente de Santiago cuando compró el Switch. El juego le gusta porque “cualquier cosa en él es entretenida”. También tiene Mario Kart, y Super Mario Odyssey, que es nuevo, pero no lo sorprende tanto como Zelda porque su universo es más conocido.
No hay que ser gamer
Andrea Maruri no es gamer, pero tiene un Xbox One X. Se lo regaló su esposo porque ella
extrañaba el que alguna vez tuvo en la casa de sus papás, una versión más anterior. “Uso el kinect para jugar Dance Central Spotlight y Fruit Ninja, y con el control de
la consola solo juego Cup
head. Me ha sorprendido lo rápido que es y me gusta lo fácil que es navegar la interface”, comenta ella, quien es arquitecta y, por esa razón, ase- gura, no le queda mucho tiempo libre para jugar.
Del Xbox One X, Maruri destaca que tiene variadas opciones de entretenimiento que no son necesariamente juegos.
“He alquilado películas, hay apps de meditación, música y opciones para gente fitness que son chéveres de explorar, por eso creo que cualquier persona puede usarla”.
Carlos Vélez sí es un aficionado a los videojuegos, tiene un PS4, no el Pro, porque ese salió hace poco y aún aprovecha bien el que compró un año atrás para reemplazar un Xbox 360.
Del PS4 le gustan los mandos o controles, siente que son más ergonómicos que los de otras consolas, y destaca que Sony haya decidido mantener el mismo diseño que les dio a las anteriores. “Se ajustan muy bien a las manos y facilita la jugabilidad”.
Otro acierto que cree tuvo Sony con el PS4 es que ya no son necesarias las baterías en los mandos para que estos funcionen, basta cargarlos mediante cables.
Entre los juegos que disfruta están The Last of Us, que es su favorito –es de los exclusivos para PS–. Además juega FIFA 18, uno de los más populares y que disfruta en línea, y por último, Unchanted 4.
Los gamers nunca habían estado tan felices como este año: tres grandes consolas en el mercado y títulos cada vez mejor diseñados, más complejos y retadores.
El término de la guerra de estos dispositivos no había cobrado tanta relevancia, y aunque en especificaciones dos de ellas no difieran tanto, cada jugador decide con cuál vivir su experiencia
“La interfaz del Play Station 4 me parece más amigable e intuitiva comparada con la que tiene el Xbox One”. CARLOS VÉLEZ DISEÑADOR