SOBRE LA NADA Y LOS DETALLES
A diario nos cruzamos con miles de eventos que pasamos por alto, conscientes o no, los ignoramos. ¿A cuántas personas les negamos una sonrisa por estar concentrados en nosotros mismos? O ¿cuántos aromas dejamos pasar para llegar rápido a nuestro destino? Son detalles que, sin darnos cuenta, podrían alegrarnos el rato, por muy insignificantes que parezcan.
A la felicidad no se llega esperando que algún gran acontecimiento se atraviese en nuestras vidas. No niego que estos están carados de emociones inexplicables y que son los que, al fin y al cabo, quedan grabados en la memoria. Solo pienso que no deberíamos limitarnos a explorar, sentir la cotidianidad.
Bueno, hay que reconocer que estamos en un mundo en el que, desde la misma sociedad, se nos pide más, hacer más y producir cada vez más. Movimiento constante, nunca quietud, es lo que nos hacen creer. Que para ser alguien hay que hacer algo… todo. Y no. A veces, al hacer nada, es cuando terminamos por encontrarnos.
Lo acepto, soy defensora del ocio, concepto que ahora parece ser aberrante, y qué. Por medio de este conocemos, crecemos y nos relajamos. Es lo que nos permite desconectarnos de todo y hacer lo que nos gusta, lo que en verdad nos mueve.
El descanso no es un lujo y no debería ser visto como tal, pues satisface al menos una de nuestras necesidades básicas. Da igual lo que se signifique, puede ser hacer ejercicio, dormir, leer, ir al campo, no importa, con tal de que cada uno lo aproveche a su manera.
Es justo y necesario tomarnos unos cuantos segundos en nuestra rutina para respirar, ver, oír, sentir. Lo que sea, con tal de que sea nuestro. Ojo, nuestro, pero sin dejar a un lado lo que nos rodea. No somos dueños del mundo, somos parte de él
A la felicidad no se llega esperando que algún gran acontecimiento se atraviese en nuestras vidas. Soy defensora del ocio, concepto que ahora parece aberrante. Por medio de este crecemos, conocemos...
* Taller de Opinión es un proyecto de El Colombiano, EAFIT, U. de A. y UPB que busca abrir un espacio para la opinión joven. Las ideas expresadas por los columnistas del Taller de Opi
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