Soluciones urgentes por el bien de la ciudad
“Las Curadurías son muy importantes para garantizar la construcción de proyectos de vivienda y de otras edificaciones bajo estándares de formalidad y legalidad. Sin la revisión oportuna y completa por parte de estos funcionarios, se pone en riesgo la seguridad de la población, la ejecución de los proyectos en los tiempos acordados, la generación de empleo y la inversión por parte del sector privado en Medellín. Las Curadurías, además licencian las edificaciones públicas y la demora se traduce en mayores costos de construcción, por los retrasos en el cumplimiento de los proyectos contemplados en el Plan de Desarrollo de la ciudad. Igual, el perjuicio es enorme para la comunidad, debido a que en las Curadurías se deben adelantar los trámites de legalización y reconocimiento de mejoras, pero muchas personas interesadas en construir, ante la inoperancia de estas, optan por hacerlo informalmente, sin los permisos y revisiones respectivas, generando un enorme riesgo sismorresistente, entre otros. Medellín solo tiene dos Curadurías en funcionamiento de las cuatro autorizadas para atender la dinámica de cerca de 2,4 millones de habitantes. Se estima que el 79% de los proyectos en estado de preventa ya alcanzaron punto de equilibrio (del 70%) y pudiendo iniciar obra, generar empleo y dinamizar la economía y la industria de la región, no lo pueden hacer debido a que no tienen el permiso de construcción que emiten las Curadurías, trámite que actualmente en la ciudad tarda mínimo 8 meses, cuando el mismo proceso en otros municipios del Valle de Aburrá y del país se demora entre 45 días y máximo 4 meses. La ciudad necesita con urgencia la definición y nombramiento de las Curadurías que no están en discusión. Si sobre la Curaduría uno hay acciones jurídicas pendientes, solicitamos respetuosamente que sean nombrados.