El equipo de hoy y el del futuro
La obligación de ganar hizo que Pekerman se aventurara con un esquema agresivo en el que “descubrió” alternativas en funcionamiento y en individualidades. Un cambio en pleno Mundial.
En plena Eliminatoria, Colombia comenzó a desnudar dificultades en funcionamiento, especialmente por el manejo dado por el técnico José Pekerman al equipo. Esta situación se reflejó en el primer choque del Mundial (derrota con Japón 21). Sin embargo, obligado a ganar, el estratega se aventuró a cambiar no solo jugadores clave y de su confianza sino en el mismo esquema de juego.
Aquí un bosquejo de lo que ha sido esa transformación en pleno Mundial (ver gráfico).
1. Con Perú (Eliminatoria 2017) El técnico planteó un 4-2-3-1 y en defensa quien tenía la obligación de ir más al ataque era Frank Fabra. Cuando este salía, Santiago Arias se sumaba a los centrales para hacer una línea de tres. Cuando Perú conducía la pelota, Carlos Sánchez retrocedía para meterse entre Dávinson Sánchez y Óscar Murillo. La tarea de Abel Aguilar era entregar la pelota de manera limpia a los volantes creativos y acompañarlos. La de Juan Cuadrado, de ganar la línea y abrir la cancha por derecha, y Duván Zapata sumarse a los volantes cuando el rival manejaba el balón pero, también, debía juntarse con Falcao en ataque y abrir espacios.
2. Con Japón (Mundial-2018, sobre la base del planteamiento con 11 jugadores inicial) La idea era similar a la de Perú (4-2-3-1). Mojica asumió la labor de Fabra saliendo hacia la línea de fondo. La estrategia solo varió en ataque, porque Cuadrado y José Izquierdo debían tener mayor libertad para atacar por las bandas y enviarle centros a Falcao, cuyo principal socio en mitad de campo sería Juan F. Quintero, a falta de James en la formación inicialista.
3. Con Japón (Mundial-2018, cuando jugó con 10 por expulsión de Carlos Sánchez) Al quedarse con un hombre menos, el técnico decide que Cuadrado e Izquierdo retrocedan por las bandas para armar un 4-3-1-1. Deja a Jéfferson Lerma como único cabeza de área en la zona de volantes. Mojica ya no puede subir continua- mente y Quintero es la única posibilidad de pase con la que queda Falcao adelante, que se desgasta por esa soledad. Tras el empate con el tiro libre de Quintero, Pekerman, en vez de cerrar el partido con un cambio más equilibrado, decide ir en busca del resultado e ingresa a James, Carlos Bacca y Wílmar Barrios. Eso le costó un gran desgaste a la Selección y Japón aprovechó para ganar.
4. Con Polonia (Mundial-2018, primera victoria) Con el habitual 4-2-3-1, Pekerman ingresa a Yerry Mina al lado de Dávinson Sánchez y se le da la tarea de marcar a Lewandowski, pero también de desdoblarse al ataque para
aprovechar su fortaleza aérea. Mojica también tiene mayor libertad de subir, mientras que Arias y Dávinson deben estar más pendientes de la zona posterior. En la volante Barrios asume la función de Carlos Sánchez y también colabora con los centrales. Abel Aguilar debe ser el nexo con Quintero y James. A Cuadrado lo libera por derecha y a James por izquierda. Y así se juntan más con Quintero y Falcao, para que también abran las bandas en ataque. Con ello el equipo mejoró en presencia en el campo y tuvo más volumen de avanzada