INFRAESTRUCTURA Fijan plazo para entregar estación San Pedro
El 15 de enero de 2019 es la fecha límite para terminar adecuaciones y convertirla en un centro de servicios.
Ariesgo de entrar en desacato por una orden judicial, Metroplús deberá tener listas las adecuaciones en la estación San Pedro, en Manrique, antes del 15 de enero de 2019. Este paradero no servirá para lo que fue construido sino que funcionará como un centro de servicios comunitarios.
El proyecto, a la fecha, está en fase de contratación de interventoría. Los diseños estarían listos en agosto y las obras tardarían aproximadamente tres meses, según informó César Hernández, gerente de Metroplús.
“La estación tendrá espacios como una bibliometro (red de bibliotecas públicas del sistema Metro), áreas comunitarias y oficinas para trámites de la tarjeta Cívica”, reveló el gerente.
Esta es la única estación del sistema de buses articulados que nunca funcionó. Desde que fue terminada, en 2012, el nivel de inclinación (14,7 %) con el que fue construida no permitió que los vehículos que funcionan a gas lograran frenar en su empinada ubicación cuando iban subiendo cargados de pasajeros.
Como suelen decir: el lugar se había convertido en un elefante blanco. Allí se invirtieron 1.133 millones de pesos y ahora Metroplús deberá de- sembolsar 720 millones más para las adecuaciones.
Corregir las lozas
La entidad fue condenada por detrimento patrimonial, pero a través de un recurso obtuvieron plazo ante la justicia para transformar la estación y volverla funcional.
Por ello, en el proceso de construcción de las adecuaciones deberán instalar unas lozas horizontales con las que desaparezca la inclinación del interior.
“Las fallas fueron un tema técnico, pese a que los diseños fueron aprobados y licenciados por la Alcaldía de Medellín. El problema apareció con la llegada de los buses y trascendió a un tema ergonómico, el desnivel puede generar situaciones de riesgo”, dijo Hernández.
De tal manera que la estación San Pedro definitivamente no tendrá aval para operación como parada del sistema de transporte (además por que hay estaciones en ambos sentidos a menos de tres cuadras de distancia), pero gracias a la evidencia adjuntada en el proceso judicial, la construcción dejará de ser inútil.
Los nuevos espacios para la comunidad serán operados y administrados por el Metro de Medellín