INDIGNAN LOS ABUSOS A NIÑOS EN MEDELLÍN
Las cifras hablan por sí solas: en 2018 van 1.798 casos de violencia sexual contra menores de edad en la ciudad, lo cual muestra aumento progresivo desde 2016 (1.397 episodios) y 2017 (1.995 denuncias).
A ello se suma la lentitud en la judicialización de los supuestos responsables.
Parte de la calidad de vida en una capital que busca ser moderna e innovar debe centrarse en los niños y adolescentes, para que no sufran ese flagelo silencioso del abuso sexual, que además implica subregistros por la vergüenza y resistencia de familias y víctimas a denunciar. ¡No más!