Así se vibró en el Altavoz Fest 2018
Después de tres días de conciertos, más de 50.000 personas se agitaron con rock, punk, rap, regge y ska.
Terminaron tres días de pogo. 59 conciertos se hicieron este año en el Altavoz Fest. Sábado y domingo sumaron cerca de 50.000 espectadores sin contar los del lunes, la fecha en que se presentaba una de las bandas más esperadas: Papa Roach.
Felipe Grajales, director del Festival Altavoz, quedó complacido, “la afluencia fue amplia y hubo muy buen comportamiento, algo a lo que ya estamos acostumbrados en este festival”.
Según Grajales, la ciudad quiere a las bandas de convocatoria y en esta ocasión “El Capitán Rocksteady y La Tripulación, Alkaman y Laberinto sonaron muy duro”.
El domingo que fue más metalero hubo un momento épico, la energía del público respondió al escuchar Al otro lado del silencio en las cuerdas de Ángeles del Infierno, agrupación española de Heavy metal. Un homenaje a Elkín Ramírez, vocalista de Kraken, que murió en 2017.
“El año pasado se comentaba que el evento fue increíble y superar la expectativa es difícil, pero este año mejoramos: el espacio incrementó y la oferta gastronómica fue liderada por programas de desarrollo económico desde los cedezos”, agregó Grajales.
Desde 2004
Altavoz es un festival de rock que se lleva a cabo en Medellín desde el año 2004. Es el festival gratuito más importante de la ciudad y el segundo más importante de Colombia, después de Rock al Parque.
El evento nació de la idea de crear un espacio para los jóvenes y los músicos de la ciudad expusieran su música, ya que en ocasiones anteriores se hicieron festivales de música que no duraron mucho tiempo; como lo fue el Festival de Ancón (1971 y 2004) y Rock a Lo Paisa (2000).
Hoy Altavoz es una plataforma musical reconocida en Latinoamérica como espacio de circulación para los sonidos hechos en Medellín, y también como un puente para que las nuevas músicas de la ciudad puedan llegar a diferentes lugares del continente. Los artis-
tas locales continúan, sin duda alguna, siendo los protagonistas de esta celebración en la que su voz es escuchada a través de canciones, en la que su talento es ovacionado y en la que pasan de ser ciudadanos normales a referentes artísticos para un público que los observa, los aplaude y admira