¿QUÉ PASA CON EL GOBIERNO DEL PRESIDENTE DUQUE?
Es verdad que cien días es poco tiempo para la valoración sería de un gobierno y es verdad que las últimas dos semanas han sido verdaderamente complejas para el Gobierno y el país - entre otros acontecimientos, con las masivas movilizaciones por la universidad pública, con los sórdidos acontecimientos, incluidas muertes con envenenamiento, asociados de una u otra manera al caso de los sobornos de Odebrecht-, todo ello se refleja en las encuestas y la baja de la opinión favorable del presidente y sus ministros, pero en general reflejo de un Estado de ánimo negativo de los colombianos.
Algunos atribuyen a la inexperiencia y juventud del presidente y mucho de su equipo, cosa que no comparto, porque normalmente nadie ha hecho seriamente ‘curso para ser presidente’ y la juventud no es per se ni una virtud, ni una carga negativa. Creo que el problema debe estar por otro lado.
Me inclino a pensar que no ha sido exitoso el Gobierno en definir, si lo tiene, un propósito nacional que contagie a los colombianos. Se habla de un ‘Pacto por Colombia’ y de una ‘economía naranja’, que no son claros qué son y cómo se vuelve realidad; ¿un pacto con quién o quiénes? ¿Pactó consigo mismo y los amigos políticos? ¿Con qué objetivos y recursos? ¿Una economía de la cultura, del arte, de la recreación?
Los anteriores gobiernos tuvieron y fueron capaces de volver un eje de su acción un gran objetivo nacional -independiente de si todos o la mayoría lo compartían-, para Juan
Manuel Santos fue hacer la Paz con las Farc con las conversaciones de La Habana, para Álva
ro Uribe fue derrotar militarmente a las Farc con la política de seguridad democrática, para
Andrés Pastrana fue hacer la paz con las Farc en el Caguán, para Ernesto Samper inicialmente cerrar la brecha social y luego no dejarse tumbar del Gobierno por sus contradictores, para César Gaviria gestionar el proceso constituyente de 1991 y posteriormente iniciar el desarrollo de la nueva Consti- tución. ¿Pero cuál es el del gobierno Duque?
Si la idea es avanzar en despolarizar el país y avanzar en una forma distinta de resolución de los conflictos, que lo menciono en varias de sus intervenciones iniciales, por supuesto creando condiciones para estimular el crecimiento de la economía, su equipo de gobierno debe atender las demandas y conflictividades sociales de otra manera -que es verdad no son su responsabilidad, pero que le estallaron en el inicio de su mandato-, como resolver el tema de la financiación de la educación pública superior de calidad y con acceso a todos -que puede iniciarse con una Mesa de Concertación como la convocada por la ministra de Educación y manejada con dirección y tolerancia-, la salud, que es otro tema que puede estallar en cualquier momento, los temas de la tierra para campesinos y comunidades afrodescendientes e indígenas, esto último en buena medida ligado a la implementación de los acuerdos con las Farc, pero que es para beneficiar a las regiones y compatriotas en los territorios más deprimidos del país.
No me alegra que al gobierno y al presidente le vaya mal, porque es un síntoma de que las cosas para todos no van bien, por el contrario, lo deseable es que al gobierno le vaya bien porque implica que mejoran las cosas para todos. Creo que la dupla del presidente con su juventud y su vicepresidenta con su experiencia, pueden hacer un equipo que reoriente la gestión del gobierno, no comunicacionalmente, sino en el direccionamiento de sus objetivos, en beneficio lo de la mayoría de los colombianos. Pero también es verdad, que si no se comienzan a tomar correctivos, las cosas pueden empeorar y eso es indeseable.
P.D. ¿Y con el Eln qué va a pasar? Es verdad que la mayoría del país compartimos la exigencia de terminación del secuestro para que la Mesa funcione, pero ¿no sería útil los buenos oficios de un tercero que ayude a que las cosas se destraben y marchen en la dirección de terminar ese conflicto armado?
Es verdad que las últimas dos semanas han sido verdaderamente complejas para el Gobierno y el país, y si no se comienzan a tomar correctivos, las cosas pueden empeorar y eso es indeseable.