LAS TALES ENCUESTAS SON INOPORTUNAS
Para un gobierno que se posesionó el 7 de agosto, que además tiene una pesada atmósfera de desorden público trasladado a paros y marchas, donde los protes- tantes llenan y llenan sus voces estentóreas con el déficit que se presenta en las cuentas de la educación, sin analizar concienzudamente la carencia real de recursos, que tiene que llevar a pensar en una ley de refinanciamiento en la hacienda pública; el asunto de las encuestas tiene el peligroso manto de que sus resultados pueden ser adivinados a la baja.
Es inoportuno el tema de las encuestas en estos momentos, pues a la mayoría de ellas van a llegar los ciudadanos encuestados con los ánimos caldeados por los paros y marchas.
No es de desconocer que los medios de comunicación le han tirado muy duro a la ley de financiamiento. Ello también pesa demasiado