DIM recibe energía
Mientras el conjunto trabaja de cara al objetivo, hinchas y exjugadores se ponen la camiseta número 12.
Ellos son 11, nosotros 44.000. Por cada uno de ellos seremos 4.000 más. Nunca ha sido fácil. Entre todos venceremos”. Ese es el eslogan que están utilizando los hinchas del Medellín en las redes sociales para impulsar la remontada sobre Junior el próximo domingo en el estadio Atanasio Girardot.
El club retomó trabajos de cara al objetivo que es dar vuelta al marcador, lo hicieron a puerta cerrada ayer en el estadio, pero al final de la práctica dialogaron con la prensa.
Los jugadores no quieren hablar más del 4-1 en Barranquilla, pasaron a la página y se concentran en lo que podrían realizar el domingo.
“Ya hablar de algo que pasó no viene al caso. Hay que pensar en lo que se viene, es un rival que conocemos y es difícil, tenemos una serie complicada pero no imposible”, dijo Juan Fernando Caicedo.
“Hay que tratar de que no nos sorprendan y nosotros sorprenderlos lo más rápido posible para ir acercándonos al resultado. No nos podemos desesperar pero tampoco relajarnos porque estamos tres goles abajo”, agregó Caicedo.
El volante Andrés Ricaurte indicó que lo primero que deben tener es la convicción, el deseo y la confianza de que se puede lograr el objetivo.
“Hay que jugar con mucha intensidad, imponer nuestro ritmo, ser muy punzantes y efectivos con las ocasiones de gol que tengamos. Junior nos hizo cuatro goles en un solo tiempo entonces debemos ser pacientes para saber manejar el partido desde la parte mental, con mucha intensidad, pero sin perder la cabeza”.
El técnico Octavio Zambrano es el más convencido de todos de que la séptima estrella es posible. “El séptimo cielo nos espera. Acá no hay lugar para incrédulos. Todos tenemos que estar convencidos de que vamos a lograrlo. Creo que va a ser un final épico y apoteósico y a eso le estamos apuntando”, proclamó.
El estratega ecuatoriano dijo que los pecados que se cometieron en Barranquilla ya están perdonados. “Ahora nos toca salir con todo, como una familia unida, más fuerte que nunca y nuestra idea es remontar. Estamos convencidos de que lo podemos hacer”.
Para Zambrano los errores cometidos en la final de ida son típicos de un grupo de jóvenes en crecimiento. “Esas equivocaciones en realidad se convirtieron en lecciones de vida deportivas y que ellos van a tener por el resto de su existencia. El día que les toque jugar otras finales sabrán lo que se debe, o no, hacer”.
Larry Angulo, protagonista de uno de esos errores, dijo que al final del partido todos se miraron en el camerino, se preguntaron qué había pasado, pero que no hubo gritos ni malos tratos. “Sabemos del potencial que tenemos y estamos tranquilos esperando el partido del domingo”.
Al optimismo de hinchas y jugadores del plantel, se sumó el de varios referentes que han aprovechado también las redes sociales para enviar mensajes positivos como Roberto Carlos Cortés y Jhon Wílmar la Pelusa Pérez.
“Quiero invitar a los hinchas a que crean en el equipo, que lo del Medellín nunca ha