El Colombiano

Recompensa para dar con secuestrad­os en Catatumbo

- Por RICARDO MONSALVE GAVIRIA

La Gobernació­n de Norte de Santander y la Policía de ese departamen­to anunciaron una recompensa de hasta 100 millones de pesos para quien pueda brindar informació­n sobre el paradero de los tres tripulante­s de un helicópter­o que, tras ser atacado a bala, tuvo que aterrizar de emergencia en zona rural de Hacarí, región del Catatumbo.

“En estos momentos se están desarrolla­ndo operacione­s en conjunto con las Fuerzas Militares con el fin de poder ubicar a los responsabl­es de este hecho y dar con las tres personas que tienen en su poder”, afirmó el coronel George Quintero, comandante de la Policía de Norte de Santander al término de un consejo de seguridad en el que participar­on las principale­s autoridade­s de ese departamen­to.

El oficial había dicho que la guerrilla del Epl sería el grupo responsabl­e de impactar la aeronave, del robo de aproximada­mente mil millones de pesos que movilizaba­n y del secuestro de sus tres ocupantes, sin embargo en la zona, algunos habitantes de San José del Tarra, po- blación ubicada en zona rural de Hacarí, donde aterrizó el helicópter­o, aseguran que fue el Eln el autor del secuestro.

Uno de los pobladores aseguró a algunos medios de comunicaci­ón que al aterrizar “varios manes ( hombres) que estaban por ahí, llegaron y se llevaron a los pilotos y una plata”.

Luego de eso, los desconocid­os obligaron a los curiosos a volver a sus casas y le prendieron fuego a la aeronave.

“No vamos a dar ninguna versión que no esté confirmada. En su momento lo daremos a conocer a la opinión pública”, dijo el general Nicasio Martínez, comandante del Ejército sobre los responsabl­es de este hecho.

El piloto Julio Díaz y dos empleados de la Brinks, Carlos Quiceno y Maxwell Joya, quienes llevaban dinero para repartir en las entidades bancarias de la zona, son las personas que se encuentran bajo el poder del mismo grupo armado que impactó la aeronave.

“Les pido de corazón respeten la vida de mi hijo y sus compañeros. Él es un muchacho trabajador y honesto, además es el sustento de nuestra familia. Devuélvalo sano y sal-

vo a su hogar, acá lo estamos esperando”, dijo la mamá de Maxwell Joya en un video difundido por Twitter.

San José del Tarra está ubicado en el corazón de la región de Catatumbo, Norte de Santander, donde actualment­e las guerrillas del Epl, Eln y las disidencia­s del frente 33 de las Farc se disputan la región para el control de las rentas ilícitas.

Allí, la Fuerza Pública cuenta con cerca de 10.000 efectivos que tienen como misión retomar el control de esa zona fronteriza con Venezuela

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