Rivaldo viaja cargado de retos con Selección sub-20
El samario habla de un equipo nacional unido y fortalecido tácticamente para enfrentar el torneo Sudamericano de Chile.
El Campeonato Sudamericano sub- 20 que comenzará este jueves en Chile representa retos importantes para el delantero samario Rivaldo Correa con la Selección Colombia.
Primero, ratificar su condición de goleador nato que el año pasado lo llevó al Independiente Medellín, donde tuvo la oportunidad de debutar en la Copa Sudamericana y de compartir con jugadores como Germán Cano, Juan Fernando Caicedo, Leonardo Castro y Hernán Pertuz, a quien considera “una gran persona”, entre otros.
A pesar de que actuó pocos minutos con los rojos por las constantes convocatorias del equipo tricolor y por el gran momento de Cano, que era el titular, en el club paisa querían prolongar por un año su contrato. Sin embargo, sus representantes prefirieron buscarle otros aires que solo se conocerán tras el cita en Chile.
Segundo, hacer una buena presentación que contribuya a la clasificación de Colombia al Mundial de Polonia. Esto, de entrada, le permitiría abrirse puertas en el exterior aunque el samario antepone todo hoy a los beneficios generales del plantel juvenil.
“No pensamos tanto en eso, la idea es hacer un buen torneo, ser colectivos, ya vendrán cosas buenas para nosotros. Somos conscientes del
gran compromiso que tenemos con el país y la importancia de hacer el trabajo como lo hemos venido haciendo hasta ahora; debemos demostrar de qué estamos hechos, quedarnos con el título y asegurar la casilla para la Copa Mundo”, dice el atacante que ha hecho su carrera deportiva en Antioquia luego de ser fichado por el Club Estudiantil y hacer todo el proceso con los seleccionados departamentales.
Unidos por la causa
En relación con la preparación para el certamen juvenil, Rivaldo destaca que “ha sido muy positiva”, en la que el grupo asimiló los conceptos que el técnico Arturo Re-
yes impartió durante cerca de 12 micro ciclos.
Lo que más valora del conjunto nacional es la unión, algo que el entrenador les recalcó a todos los integrantes desde el primer día: “Somos una familia, en la que nos tratamos como hermanos y eso se refleja en el desempeño en la cancha”.
Puntualiza en que se siente en buen nivel, con ganas de mostrar sus condiciones, “con paciencia y trabajo” como lo ha hecho hasta ahora. Por el momento su pensamiento y el de todos los compañeros está puesto en Venezuela, el primer rival, al que ya enfrentaron en amistosos con una derrota y un empate