El país le da un empujón a la ciencia
Colombia Científica destinará $74 mil millones para financiar estudios de maestrías y doctorados.
Con la sanción de la Ley 1951 de 2019, el pasado jueves 24 de enero, el Gobierno dio el aval para que, en menos de un año, se constituya el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación (CTei) (ver Glosario).
Esto quiere decir que programas como el de Colombia Científica, apoyado por el Gobierno y el Departamento Administrativo de Ciencia, Tecnología e Innovación (Colciencias) serán parte de esta nueva etapa.
El reto está en buscar el aumento de los recursos destinados para este sector, que en principio contarían sólo con el presupuesto asignado por el Gobierno a Colciencias en 2019, es decir, 123 mil millones de pesos, más 233 mil millones de pesos que provienen del Fondo de Regalías para CTeI. En total, el presupuesto es de 356 mil millones de pesos, uno de los más bajos en comparación con otros sectores (ver Antecedentes).
A través de alianzas interinstitucionales, Colombia Científica busca mejorar la calidad de las Instituciones de Educación Superior (IES), en cuanto a investigación, docencia e internacionalización.
El programa, que dirige Víctor Hugo Malagón, apoya a la consolidación de un sistema de investigación e innovación científica articulada con el sector productivo para con-
tribuir a mejorar la competitividad, productividad y desarrollo social del país.
Este programa es un piloto que se hace con el apoyo técnico y financiero del Banco Mundial y se promueve a través del Ministerio de Educación, Colciencias, Icetex y el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo.
“Es un modelo de gobernanza muy interesante y ese programa sigue bajo el techo del Ministerio de Educación, de Comercio, Icetex y Colciencias, en este caso, Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación. Los programas arrancaron el año pasado y la idea es que continúen las ocho alianzas que fueron adjudicadas”, aseguró Diego Hernández Losada, director de Colciencias.
Ecosistema científico
En este componente participan ocho proyectos de investigación que ganaron las convocatorias públicas de Colciencias. La inversión para este
campo es cerca de 160 mil millones de pesos.
En la primera convocatoria los proyectos seleccionados son los siguientes:
1. Reconstrucción del tejido social en zonas de posconflicto en Colombia, de la Universidad de Caldas.
2. Bio- Reto XXI - 15: 50, que busca el desarrollo de bioproductos para los sectores salud, agropecuario y cosmético, de la Universidad Industrial de Santander.
3. Alianza académico científica para el fortalecimiento de las IES, de la Universidad Pontificia Bolivariana.
4. Estrategia de transformación del sector energético colombiano en el horizonte
2030, de la Universidad Nacional de Colombia.
En la siguiente convocatoria los proyectos seleccionados son:
1. OMICAS: Optimización Multiescala In-silico de Cultivos Agrícolas Sostenibles (Infraestructura y validación en Arroz y Caña de Azúcar), de la Pontificia Universidad Javeriana - Sede Cali.
2. Generación de alternativas terapéuticas en cáncer a partir de plantas a través de procesos de investigación y desarrollo transnacional, articulados en sistemas de valor sostenibles ambiental y económicamente, de la Pontificia Universidad Javeriana.
3. Inclusión productiva y social: políticas para la promoción de una economía formal, de la Universidad del Rosario.
4. Programa para la sostenibilidad energética de los sectores industrial y de transporte colombiano mediante el aprovechamiento de recursos renovables regionales, de la Universidad de Antioquia.
Con respecto a este componente, Carlos Sepúlveda, decano de la Facultad de Economía de la Universidad del Rosario y líder del Semillero de Investigación que hace parte del Ecosistema Científico, espera que el nuevo Ministerio mantenga y potencie ese tipo de iniciativas.
Pasaporte a la ciencia
Este componente pretende apoyar la formación de alto nivel de profesionales e investigadores colombianos mediante la alianza entre universidades nacionales e internacionales, o en alguna de las universidades del Academic Ranking of World Universities (ARWU) o ranking de Shanghái.
La primera fase del programa cuenta con 74 mil millones de pesos para financiar becas de maestría y doctorado en Universidades que cumplen altos estándares interna-
cionales. Más del 80 % de los seleccionados son personas de estratos 1, 2, 3 y 4.
Dentro de las Universidades que cuentan con Alianzas en este componente se encuentran: Columbia University; Universidad Autónoma de Madrid; Harvard; London School of Economics; Universidad de Nueva York; entre otras. Sin embargo, para Andrea
Rojas Ávila, economista, Máster en Comercialización de Tecnología de la Universidad de Texas; aún falta articulación entre investigación y comercialización de tecnología.
“De pronto en las universidades el tema de la investigación aplicada todavía no ha tenido el éxito que uno espera, creo que Colombia ha hecho un esfuerzo significativo en esta materia con programas como Colombia Científica, donde están apostándole a ciertos puntos prioritarios y estratégicos para la región, pero siento que aun hacen falta recursos”.
Y es que el tema del dinero es un asunto complejo para este sector. Como se mencionó anteriormente, el nuevo Ministerio entraría en función con una de las partidas más bajas del Presupuesto General de la Nación.
Pese a que la creación del Ministerio para CTeI es positiva en tanto que se avanza en darle una oportunidad de institucionalizar el sector, sin embargo, “la política del Gobierno debe tener un foco claro”, asegura Sergio Lopera, doctor en Economía de la Universidad Nacional.
“El país tiene una gran incapacidad institucional para competir en el mercado mundial, porque no hemos logrado hacer de la innovación un mecanismo efectivo que afecte la producción del país, ese es el principal reto”, afirmó.
Con respecto a este punto,
el actual director de Colciencias, Hernández Losada, aseguró que en la medida en que el país progrese, avance y haya un mayor crecimiento económico, “será necesario aumentar el presupuesto para CTeI, porque es una muestra del progreso, es a lo primero a lo que se le debe apostar”.
Desde el sector de investigación universitaria, Sepúlveda espera que sea la oportunidad para reestructurar la manera que se financia investigación y ciencia en Colombia en un marco de largo plazo. “Ojalá no sea renombrar a Colciencias en el Ministerio, sino que sea una apuesta al fortalecimiento institucional y de motor de crecimiento en CTeI”, apuntó.
Finalmente, para el director de Colombia Científica el Ministerio requiere un esfuerzo institucional ambicioso, en el que se evalúe al sector en todo su conjunto, “que sea integrador de los distintos focos y sectores del país, que realmente le dé el estatus de Ministerio a los temas de ciencia, tecnología e innovación”