“Para fin de año se anuncia presentación de proyecto de reforma pensional, mientras en el Plan de Desarrollo hay artículos que hay que mirar con atención. El problema clave: la baja cobertura”.
Para fin de año se anuncia presentación de proyecto de reforma pensional, mientras en el Plan de Desarrollo hay artículos que hay que mirar con atención. El problema clave: la baja cobertura.
En los últimos días el tema de los derechos pensionales de los colombianos ha producido varias noticias. La más importante fue el anuncio oficial de la presentación al Congreso, prevista para el último trimestre del año, de un proyecto de reforma pensional. No se conocen detalles de la iniciativa gubernamental y solo se ha dicho que no contemplaría un ajuste –entendido como aumento– de la edad para obtener la pensión, cumpliendo de esa forma una promesa de campaña del presidente Duque.
Pero hay cambios inminentes. En el Plan de Desarrollo, todavía en trámite legislativo en el Congreso, hay algunas propuestas que tocan el Sistema General de Pensiones. Dentro de estas, se encuentra la modificación al régimen de inversión de los fondos voluntarios para facilitarles la obtención de mejores rentabilidades, la eliminación del reconocimiento simultáneo de pensiones y la finalización del reconocimiento irregular de prestaciones.
Los anteriores son ajustes necesarios al Sistema y no deberían causar mayor polémica. En donde sí hay mucho desacuerdo es en otra propuesta contenida en el articulado, según la cual los afiliados al sis
tema de pensiones que no hubieran contado con doble asesoría, podrían trasladarse en los próximos cuatro meses a Colpensiones o a un fondo privado, aun faltándoles menos de diez años para la pensión.
La anterior propuesta surge porque están empezando a pensionarse los primeros aportantes a los fondos privados (AFP), con mesadas muy inferiores a las que hubieran podido obtener en el régimen subsidiado de prima media. Esto ha llevado a que la presión por volver a este último se haya incrementado y a que los cotizantes con menos de diez años para su pensión acudan a las demandas y acciones de tutela para obtener su traslado.
En esas condiciones, si la propuesta del Plan de Desarrollo prospera haría tambalear el sistema pensional. La primera razón es que está cambiando las reglas del juego sin considerar el tema pensional en toda su complejidad. Puede pasar que se presente una demanda masiva de retiro de afiliados que afecte el ahorro en las AFP. El sistema público también sufriría una gran presión al recibir personas que están cerca de la edad de pensión.
Si las pensiones son más altas en el régimen de prima media es por la magnitud de los subsidios que se conceden. Deberían equipararse las condiciones para que puedan coexistir los dos sistemas, pero eso debe hacerse dentro de una reforma pensional que resuelva el tema de los pilares con todas sus consecuencias. Lo más preocupante de todo es que un asunto tan crucial se quiera resolver por fuera de la reforma pensional.
También fueron noticia las declaraciones del presidente de Colpensiones acerca de la inexistencia de una “bomba pensional” en Colombia porque la cobertura es baja y las altas pensiones del pasado ya se están marchitando (El Tiempo, 16/04/2019). Hay que reconocer que el presidente de Colpensiones tiene un punto: la cobertura es muy baja y esto hace que sea relativamente poco el dinero que finalmente se necesita para pagar las pensiones. Sin embargo, en el mediano plazo hay que apostarle a que la cobertura aumente. Hay que diseñar un sistema pensional que incremente la cobertura y que sea sostenible a medida que la población vaya envejeciendo. Lo que requeriría más trabajo formal, mayor solidaridad entre grupos de ingreso y recursos fiscales que lleguen a las personas de avanzada edad que no pudieron cotizar