Frida Khalo retrato de la imperfección
Rompió esquemas y se liberó de todo estereotipo. Este es el singular valor de la artista mexicana.
“Pies, ¿para qué los quiero si tengo alas pa’ volar?”. Frida Kahlo
Alos 7 años contrajo poliomielitis y a los 18 tuvo un accidente de tránsito que la hizo someter a 32 operaciones durante su vida. Sus desgracias las volvió obra de arte. Sus más de 200 pinturas son principalmente autorretratos en las que representa tanto su debilidad como su fortaleza.
Hace un mes la Fonoteca Nacional de México dio a conocer el que sería el primer audio con el registro de voz de Frida Kahlo. Lee un texto denominado Retrato de Diego, dedicado a su esposo Diego Rivera. Fue justo antes de celebrar los 65 años de su muerte: se cumplen el 13 de
julio. Con su voz, muchos volvieron a pensar en ella.
Revolucionaria
Su uniceja es casi una bandera de rebeldía, de belleza atípica. Para unos es un ícono del feminismo, para otros símbolo de la liberación femenina de los estereotipos físicos; otros la ven plena: arte, rebeldía, revolución, originalidad.
La vida y obra de Kahlo ha sido estudiada por Gregorio Luke, especialista en biografías de artistas mexicanos. Para él es fundamental reconocer que hoy en día tiene un sustento estético fundamental, no solo un manto de fama. “Entre más la gente habla de Frida Kahlo más importante se vuelve”. Él explica que la artista incorpora el legado indígena y europeo en su pintura, algo que ayudó a difundir su trabajo. “Encuentras en su obra ecos del arte costumbrista español, del surrealismo, los exvotos y el arte popular”. Siente que cada vez que habla de su propuesta la gente ve en ella algo que les pertenece. “Puede ser en países como Australia o Polonia, todos se identifican con Frida”. Su vida es como un ícono, hasta en camisetas y afiches se le ve. Su pintura es una extensión de su cuerpo.
Ser ella
Precisamente un segundo nivel de relevancia de la pintora está en su vida. Luke señala que ella se logra sobreponer a las secuelas de una tragedia en su adolescencia. Lo notable, añade el investigador, es que logra vivir a pesar del dolor. Se niega a que se le compadezca o trate como una enferma, “está plenamente viva”.
Con los mismos ojos la ve la actriz colombiana Flora Martínez, quien adaptó el monólogo Frida l i bre hace cinco años: “Retrata su propia imperfección, sus debilidades, obsesiones, su dependencia amorosa y nos deja algo así como un mapa, una evidencia o un espejo, quizás”.
Su primer autorretrato se lo envió a uno de sus novios con el mensaje: “Ponlo donde te vea”. Ahora que su imagen hace parte de la cultura popular, bajo sus pobladas cejas mira como diciendo que está viva y libre