EL LEGADO FINAL DE STEPHEN HAWKING
Sorprendente el legado de
Stephen Hawking, el físico teórico fallecido en 2018. En su libro póstumo, Breves respuestas a las grandes preguntas, en el que trabajaba cuando falleció, de manera sencilla trata de resolver esas inquietudes que todos nos planteamos.
Lo terminaron de compilar su hija y varios científicos cercanos a él.
A cada una de las 10 preguntas les da explicación científica, pero como aún siguen siendo preguntas no resueltas, escoge la que cree la mejor explicación.
Comenzando por la que da sobre Dios. “Si quiere, puede llamar “Dios” a las leyes de la ciencia, pero no sería un dios personal al que pudiera encontrar y preguntarle”.
No cree en extraterrestres visitándonos. Si hay vida inteligente en el universo, debe ser a distancias muy grandes, de otro modo nos habrían visitado.
Cree que este mismo siglo se modificarán la inteligencia y la agresividad, factor que nos amenaza, pues sigue igual a la época de las cavernas. Es para él un riesgo, junto a una guerra nuclear y el calentamiento que puede convertirnos en un Venus, a 250° Celsius.
“De una forma u otra, considero casi inevitable que haya alguna confrontación nuclear o que la catástrofe ambiental paralice la Tierra en algún momento en los próximos mil años...”.
Será imposible prohibir la ingeniería genética, creará superhumanos que generarán problemas importantes porque los humanos no mejorados no podrán competir: morirán o perderán importancia.
Para ir a conquistar estrellas, de acá a máximo 500 años, sería mejor enviar máquinas cada vez mejores en vez de seres con un ADN frágil, aunque en 1000 años la complejidad biológica será mucho más alta que la actual.
Hawking afirma que es imposible predecir el futuro. Las leyes físicas lo permiten pero es demasiado complicado su manejo, como tampoco es posible viajar en el pasado. No puede ser descartado por la comprensión actual de esas leyes pero causaría grandes problemas lógicos, como que alguien vaya al pasado a matar a nuestros padres antes de que naciéramos.
Su otro temor es que la inteligencia artificial nos sobrepase. Por eso hay que asegurarnos que funcione a nuestro favor y no se salga de curso.
Son solo detalles de esas respuestas a las grandes preguntas, todavía con un nivel de incertidumbre.
Cuenta Lucy que su padre no sabía si en verdad había hecho una contribución a nuestro entendimiento del universo. No quedan dudas de que lo hizo.