LA MARCHA DE LA MENTIRA
La responsabilidad de lo que pueda pasar hoy, es plena y únicamente de los organizadores que se esconden en sus casas.
Hoy salen a marchar a favor de la mentira y en contra de la democracia.
Marchan “porque el gobierno va a bajar el salario mínimo”.
Pura mentira, el gobierno nunca ha hablado de rebajar el salario mínimo, no ha presentado un proyecto de ley en ese sentido y no lo va a presentar.
Marchan “porque el gobierno va a subir la edad de jubilación”. Pura mentira, el gobierno nunca ha tratado ese tema ni lo tratará.
Marchan “porque el gobierno no ha cumplido con el presupuesto para la educación”. Mentira, el gobierno, por el contrario, aumentó el presupuesto para la educación cumpliendo la promesa, esa sí incumplida, de Juanpa (como le gusta que le digamos) y quien nunca cumplió lo prometido, ni esto, ni nada distinto a entregarles el país a los guerrilleros.
Marchan “porque el gobierno va a vender a Colpensiones”, mentira: el presidente Duque ni ha dicho eso ni lo ha pensado.
Fecode, siempre mentiroso, Adida en Antioquia igualmente, las centrales obreras, los estudiantes, los encapuchados y los no encapuchados, tendrán que responder por lo que pase el 21 de noviembre. Son hasta cómicos; un estudiante respondiendo las preguntas de una periodista, dijo que los encapuchados eran miembros de la policía, la periodista se tragó semejante mentira y no le dijo por qué no les quitaban esos elementos para mostrar que era cierto eso de policías encapuchados.
Las autoridades tienen que actuar, tienen que repeler el ataque, no queremos ver a unos policías defendiéndose de los ataques, de las piedras, de la papas bomba, de esos criminales en general, sólo con los escudos y no con las armas que les da la Constitución para defender la vidas y los bienes del pueblo colombiano.
No queremos ver más sangre de policías y soldados, producto del vandalismo de unos desadaptados mentirosos, que se dejan llevar por demagogos y apátridas para destruir y acabar con la democracia colombiana.
Además de defenderse de quienes los atacan, deben detener y juzgar a quienes los mandan a delinquir. Mientras los líderes sindicales y profesores ven complacidos por televisión cómo acaban con la patria, las autoridades deben proceder y detener a estos responsables de lo que pase en esas marchas desenfrenadas.
Los transportadores de carga, conscientes del error de salir a marchar sin argumentos válidos, anunciaron la no participación en estos hechos tan peligrosos para la estabilidad de Colombia.
En cambio, los educadores, que no maestros porque ese término les queda muy grande, salen a protestar por lo que ellos deben saber que el gobierno sí cumplió lo que Juanpa (como le gusta que le digamos) incumplió a pesar de las promesas hechas apoyado en la medallita del premio inmerecido y comprado.
Repito, la responsabilidad de lo que pueda pasar hoy, es plena y únicamente de los organizadores que se esconden en sus casas, mientras los incautos exponen el pellejo y su integridad por una causa mentirosa, como mentirosos son los que los llevan hasta la violencia