El Gobierno debe tomar acciones de protección
La protesta social es un derecho que tenemos todos los ciudadanos, mucho más cuando están representando a un grupo de la sociedad, por eso los reclamos de Fecode, en las calles o ante el Gobierno, son válidos. Hay que rechazar las amenazas contra quienes representan liderazgos de sus comunidades, que es lo que está pasando actualmente y, en particular, con los educadores. Sus reclamos también están enfocados en la defensa de la vida y las comunidades, y ahora están amenazados. En cuanto a las respuestas del Gobierno, hay que decir que es un asunto complejo, porque aunque se ha mostrado abierto al diálogo, que es importante y debemos reconocer, en materia de asesinatos y amenazas ha faltado una decisión más fuerte, no solo en sancionar estos hechos, sino en hacer las investigaciones y dar las garantías para que estos hechos no sean reiterativos, que es lo que está sucediendo en el país. El mensaje que se está dando es que no se está actuando en la defensa de los amenazados, pero en Colombia necesitamos liderazgos que muestren los problemas que se viven, que hagan posible que el Estado tome las medidas en los aspectos en los que está fallando con su responsabilidad de garantizar la vida de quienes se meten a visibilizar las dificultades del país. La educación debe enfrentar nuevos retos, por lo que requiere de un maestro que esté a la altura para esas nuevas circunstancias sociales. Si uno revisa las recomendaciones de la Misión de Sabios se encuentra con que una de ellas es crear un instituto de formación de maestros, para que entiendan las transformaciones que está viviendo el país y el mundo en la actualidad. Allí hay una complejidad, que obliga a una revaluación del modelo del sistema educativo, donde tenemos que trabajar en competencias ciudadanas y de lectura.