El Colombiano

NBA, la codiciada liga que Colombia aún no ha podido alcanzar.

Expertos explican por qué ningún jugador local ha saltado a la élite de este deporte en EE. UU. y qué se necesita para cumplir el sueño.

- Por JESSICA QUINTERO SERNA AFP

La aparición del barranquil­lero Jaime Echenique en el próximo draft (proceso que se utiliza para poder asignar determinad­os jugadores a los equipos de la NBA), el 25 de junio, vuelve a ilusionar al país con tener a su primer representa­nte en la liga de baloncesto más importante del mundo.

Justo por estos días, cuando volvió a aparecer la fiebre por este torneo por cuenta de The Last Dance, el popular documental que se emite en Netflix – según la plataforma fue visto por 23.8 millones de personas en el mundo y es uno de los 10 contenidos más vistos en Colombia–, sobre una de las leyendas de la NBA, Michael Jordan, y sus días de gloria con los Chicago Bulls en la década de los noventa, surge nuevamente la pregunta: ¿algún día un colombiano podrá brillar en esa liga y seguir los pasos o, mejor dicho, los saltos de “Air Jordan”?

La élite del deporte de la pelota naranja ha sido esquiva para los basquetero­s nacionales desde los noventa, cuando Álvaro Teherán (fallecido el 4 de mayo pasado) estuvo cerca de ser parte de los Philadelph­ia Sixers. De ahí en adelante solo tres, incluido Echenique, se han acercado a esta organizaci­ón.

Aunque en el país hay talento, como lo reconocen los selecciona­dores nacionales Guillermo Moreno y Tomás Díaz, factores como la formación tardía, la estructura organizaci­onal, la poca exposición, los métodos de entrenamie­nto, las condicione­s y necesidade­s del mercado le han impedido a Colombia abrirse paso en esta liga.

Raúl Pabón, entrenador de las seleccione­s Antioquia juveniles y asistente técnico del club Academia de la Montaña, señala que, si bien, para llegar a la NBA un jugador necesita tener un historial importante de competenci­a antes de considerar­se elegible en el draft, hay que mirar más atrás y saber cómo y en qué etapa inició su proceso de formación, que en el caso de los colombiano­s comienza tarde.

Ejemplo de ello son Teherán, quien fue descubiert­o por el técnico de Bolívar, Jairo Ramírez, cuando tenía 19 años y Echenique, quien viajó a EE. UU. rozando los 18 luego de un paso fugaz por Medellín.

“Hay que perfilar a los jugadores desde los colegios y las categorías de formación, para eso es necesario que se unifiquen conceptos con la Federación y tener líneas de desarrollo y trabajo iguales, eso hará que se formen más jugadores y mejore la competenci­a local para que estos muchachos puedan llegar en mejores condicione­s y en edades más tempranas con un buen proceso”, comenta Pabón.

Encontrar a esos talentos

La búsqueda de jugadores que cumplan, según Tomás Díaz, con “condicione­s físico atléticas que se salgan de los parámetros” son caracterís­ticas para hacerse un lugar en esta disciplina.

Es decir, adolescent­es cercanos o que puedan superar los dos metros de estatura, que sean fuertes, veloces, que tengan destreza con el balón e inteligenc­ia de juego, “que cumplan con la especifici­dad del deporte a temprana edad”, indica Díaz.

En regiones como el Valle, la Costa Atlántica, San Andrés y el Urabá, se encuentra el biotipo que se requiere. Sin embargo, hay un departamen­to excepciona­l: Chocó.

El periodista y relator de la NBA, Álvaro Martín, que estuvo en Medellín en 2019 durante el campamento Básquetbol Sin Fronteras, resaltó el talento deportivo que hay en dicha zona, pero sostuvo que la cualidad en sí misma no es suficiente y se está desaprovec­hando por falta de apoyo.

“Chocó está lleno de NBA’s pero hay que ir a buscarlos a tiempo, entrenarlo­s, educarlos, tienen que aprender inglés en algún momento, traerlos a campamento­s como este, ofrecerles becas universita­rias, ser fichados por los equipos”.

Según él, el primer paso es la captación y capacitaci­ón. “Pueden recibir mucha ayuda de afuera pero esto es lo que tiene que hacer el país y no solamente la Federación, también la empresa, y muchos otros actores para que esos jugadores, con potencial enorme, activen este deporte”, explicó Martín.

Exposición internacio­nal

Otro punto para aspirar a llegar a la Liga estadounid­ense es el fogueo y la exposición, como lo indica el selecciona­dor Guillermo Moreno.

“Para ser competitiv­o en Estados Unidos o internacio­nalmente se necesita de mucha competenci­a y varios de nuestros jugadores llegan a determinad­a edad sin un número de partidos importante­s en su historial, eso los pone en desventaja”, explica, y agrega que entre más exposición se tenga “más relevante será a los ojos de los equipos”.

En casos como el de Braian Angola, quien en 2018 y 2019 jugó con Lakeland, equipo filial de los Magics en la G-League (Liga de desarrollo de la NBA), o Echenique, que hace parte de Shockers, club de la Universida­d de Wichita State y que compite en la NCAA (National Collegiate Athletic Associatio­n o liga universita­ria), y cuya exhibición ha mejorado ostensible

mente, suman opciones de llegar a la máxima división del básquet norteameri­cano.

No obstante, señala Raúl Pabón, son casos inusuales, pues los que “alcanzan a estar cerca lo hacen con esfuerzos individual­es o de algún agente que los capta pero no porque en el país exista un proceso que los catapulte”, dice el entrenador antioqueño.

Estructura con carencias

La exposición y el fogueo están directamen­te relacionad­os con la organizaci­ón que el país le brinde a sus jugadores.

Aunque Colombia cuenta con una liga profesiona­l, esta dura solo tres meses (de sep

tiembre a diciembre) y tiene siete equipos participan­tes, mientras que en países de la región, como Argentina y Brasil, hay torneos con 14 o 20 clubes que juegan de seis a ocho meses.

El exvicepres­idente de la Federación Colombiana de Baloncesto (2018) y representa­nte a la Cámara, Mauricio Parodi, es autocrític­o y señala a la dirigencia como la responsabl­e de que en el país el básquet no llegue al nivel que se requiere para tener jugadores en la NBA.

“Tenemos un problema de estructura en la base del baloncesto y es el manejo de la dirigencia. El trabajo ha

sido muy inferior a los grandes deportista­s y aficionado­s que tenemos, no hay una disposició­n a nivel federativo que capte los talentos, ni les brindamos a los niños y niñas torneos en los que puedan estar compitiend­o permanente­mente a temprana edad”, analiza Parodi.

El dirigente agrega que “tampoco hemos podido hacer un buen torneo profesiona­l, los que hay son muy esporádico­s, entonces los deportista­s se desestimul­an porque tienen que escoger entre estudiar, trabajar o jugar y este último no se remunera bien o ni siquiera se les paga y obviamente prefieren abandonar”.

Al igual que Parodi, el antioqueño Juan Diego Tello, quien jugó en la NCAA, el torneo universita­rio que sirve de plataforma hacia la NBA, sostiene que la “capacidad de nuestro basquetbol­ista es grande”, pero no hay quien los promueva para dar el salto. “Lamentable­mente no todos tienen la suerte que tuvimos unos cuantos de irnos becados a Estados Unidos”, dice el jugador antioqueño.

Díaz, por su parte, es consciente que en el país se debe mejorar la competenci­a. “Pedirles que maduren en su proceso, jugando torneos de una semana cada año es absurdo. No obstante, la Federación está trabajando para hacer eventos largos desde las categorías inferiores”, dice.

Argentina, el ejemplo

Para Díaz y Moreno, el país latinoamer­icano que más atrae a la NBA es Argentina, ya que cuenta con una organizaci­ón profesiona­l que brinda “tan buenas condicione­s que los jugadores ni siquiera necesitan irse a EE. UU.”, apunta Díaz.

“Argentina es una cantera infinita de jugadores y un espejo importante para Latinoamér­ica, primero por su organizaci­ón interna”, complement­a el selecciona­dor.

Del mismo modo, agrega Moreno que “los resultados son notorios: son campeones Olímpicos (2004), subcampeon­es mundiales (2002 y 2019) en la máxima categoría y en las inferiores han tenido cantidades de triunfos”.

Si bien en el país hay talento, lo que se necesita es formación y un sistema con bases solidas que perfile a los jugadores a la élite

 ??  ??
 ??  ??
 ?? FOTO ?? Braian Angola (derecha) compitió en 2018 y 2019, en la Liga de desarrollo previa a la NBA; sin embargo, su equipo no lo tuvo en cuenta en la plantilla principal.
FOTO Braian Angola (derecha) compitió en 2018 y 2019, en la Liga de desarrollo previa a la NBA; sin embargo, su equipo no lo tuvo en cuenta en la plantilla principal.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Colombia