Sin regla fiscal por dos años
Suspender este mecanismo de control de deuda, crea incertidumbre por el futuro de la calificación de riesgo.
Suspensión de este mecanismo de control de deuda le da al Gobierno mayor margen de maniobra para conseguir recursos y así atender la pandemia. Analizamos los riesgos.
Hace un año el Marco Fiscal de Mediano Plazo (MFMP) emitido por el Ministerio de Hacienda cuantificó los costos de la potencial afectación ante la ocurrencia de un gran terremoto y de un fenómeno de La Niña. La cifra, según el texto que deberá ser actualizado antes de que termine este mes, sería de 51,7 billones de pesos, es decir 5 % del Producto Interno Bruto (PIB), lo que de haber ocurrido habría elevado la deuda del Gobierno de 48,4 % del PIB en 2018 a 55,6 % en 2019.
La contingencia de la covid-19, inimaginada para quienes cada año revisan y proyectan las cuentas del país, va superando los estimados elaborados para la eventual atención de los daños causados por un movimiento sísmico de gran magnitud y un extremo evento climático, y hoy sobrepasa el 6,1 % del PIB.
Un respiro
En ese contexto, una de las preocupaciones del Ministerio de Hacienda ha sido dar cuenta de los movimientos de la regla fiscal, es decir, el mecanismo implementado desde 2012 que busca garantizar la sostenibilidad de la deuda pública y la estabilidad macroeconómica del país.
Es así como en el arranque de esta semana el Comité Consultivo para la Regla Fiscal (CCRF) suspendió el cumplimiento de esta en 2020 y 2021. Vale la pena recordar que para este año se tenía un objetivo inicial de déficit para el Gobierno Nacional Central (GNC) de 2,3 % del PIB, que se revisó
a 4,9 % en las primeras semanas de la pandemia, y que había sido nuevamente ajustado a 6,1 % del PIB en mayo.
Ramón Javier Mesa, integrante del CCRF, explicó que la suspensión fue autorizada para atender la actual emergencia sanitaria y económica representada, básicamente, en las medidas para la atención en salud, las ayudas a la población en condición vulnerable y los mecanismos para proteger el empleo.
Las inquietudes
Para los analistas económicos de Bancolombia, durante la última década los inversionistas tuvieron certeza sobre el manejo de las finanzas públicas gracias a la existencia de una meta de déficit, la cual hacía previsibles las tendencias de tributación, gasto y financiamiento del Gobierno anualmente.
Con la aplicación de la cláusula de escape se genera incertidumbre con respecto a la forma en la que estas variables se comportarán durante este y el próximo año. En un escenario pesimista, Bancolombia calculó que la cifra de déficit podría rondar 7,8 % del PIB este año y 7,7 % en 2021.
Desde la óptica de Credicorp Capital con la suspensión de la regla fiscal la probabilidad de perder el grado de inversión por las calificadoras de riesgo en los próximos 12 o 18 meses aumentará, y por eso será relevante el MFMP, que se publicará este mes, cuyos supuestos económicos serán la carta de navegación para los próximos años, observando cambios sustanciales frente a los proyectados en 2019 (ver gráfico).
De esta suspensión, según Bancolombia, se deriva que será el Gobierno elegido en 2022 el que asuma la responsabilidad de la regla fiscal, mientras que Credicorp anotó que el ajuste requerirá de un esfuerzo de la sociedad para generar ingresos tributarios, es decir una reforma tributaria (ver Paréntesis)