UN ECOSISTEMA HIPERDIVERSO
Según se lee en la investigación, el muestreo de arañas se realizó en un ecosistema de pastizales alpinos en el Valle del Cauca, el Páramo Las Hermosas, en noviembre de 2018. El área de estudio está dominada por pastos tussock, arbustos enanos y Espeletia, con pocas manchas de arbustos y árboles. Se tomaron muestras de las arañas mediante búsqueda visual y con una red de barrido, se almacenaron individualmente en alcohol al 95% y se transfirieron a un congelador s -20°C. La recolección de los especímenes se realizó bajo el permiso otorgado por la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (ANLA) a la Universidad Icesi. Según los autores del estudio, el objetivo de la investigación es “contribuir al conocimiento taxonómico que se requiere para inventariar el ecosistema hiperdiverso pero amenazado de los páramos colombianos”.
Por otra parte, tampoco está claro si las propiedades de la seda producida por una especie de araña se ven modificadas por factores climáticos. ¿Una araña que vive en las altas montañas, como Ocrepeira klamt, produciría la misma seda si fuera nativa de una región mucho más baja de la cordillera?
La respuesta a estas preguntas podría proporcionar pistas importantes sobre las condiciones en las que se forman y desarrollan las inusuales sedas de araña.
En la misma línea, el equipo, especializado en el estudio de este biomaterial, también explora la posibilidad de que existan proteínas de seda de araña que, por sus propiedades, sean aún más adecuadas para determinadas aplicaciones en biomedicina y biotecnología que las proteínas de seda actualmente conocidas.
“Cuanto mayor sea la variedad de sedas de araña que conocemos, mayor será el potencial para optimizar los biomateriales existentes y desarrollar nuevos tipos de biomateriales a partir de proteínas de la seda”, concluye Hopfe.